Este viernes la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), otorgó por primera vez en su historia un Doctorado Honoris Causa Post- Mortem, a Refugio Reyes Rivas, arquitecto empírico nacido en 1862, quien de niño trabajó en la construcción de las vías férreas del porfiriato en Zacatecas, luego se convirtió en albañil y terminó diseñando y construyendo más de 40 iglesias y casas en los estados de Aguascalientes, Jalisco y su estado natal.
En sesión especial del H. Consejo Universitario, se reconoció la “exquisita sensibilidad estética y de audaz ingenio en la construcción”, del hombre nacido en la comunidad de Sauceda de la Borda. Treinta años después de su muerte –ocurrida en 1942-, la Universidad Autónoma de Aguascalientes lo condecoró con el título pos mortem de Arquitecto.
La ceremonia especial, realizada de forma “híbrida”, pues por previsión sanitaria se permitió que los consejeros universitarios participaran de forma presencial en el teatro universitario Fernando Calderón y virtual –por internet-, simultáneamente, estuvo presidida por los integrantes del H. Consejo Universitario, que encabezan el rector Rubén Ibarra Reyes y el secretario general Ángel Román Gutiérrez.
Entre otras personalidades y autoridades, al acto acudieron además María de Jesús Muñoz Reyes, directora del Instituto Zacatecano de Cultura “Ramón López Velarde”, y la señora Thalía Eugenia Rivera Romo, bisnieta del arquitecto Refugio Reyes Rivas, y quien en representación de la familia del condecorado, recibió el título honorífico.
Sólo en el estado de Zacatecas, a Reyes Rivas se le reconoce haber intervenido arquitectónicamente la Capilla de Nápoles –joya del barroco mexicano del siglo XVIII-, adjunta al Convento Franciscano de Guadalupe, así como el acceso al Museo de Arte Virreinal, en el centro de la ciudad de Guadalupe. Además del diseño y construcción del Templo de Guadalupito, y del mercado General Jesús González Ortega, en la capital zacatecana, entre muchas otras obras.
La aportación del trabajo de Refugio Reyes Rivas es tan importante, mencionó Ángel Román Gutiérrez, que en el año 1985, tres décadas después de su muerte, la Universidad Autónoma de Aguascalientes decidió otorgarle el título post mortem de Arquitecto, y actualmente legisladores de esa entidad, tiene considerado colocar su nombre en letras doradas, en el muro de honor del Congreso del Estado aguascalentense.
Por ello, al cumplir con los lineamientos que la Universidad Autónoma de Zacatecas estipula al respecto, el H. Consejo Universitario determinó aprobar por unanimidad, el otorgarle al arquitecto Refugio Reyes Rivas, el título de Doctor Honoris Causa Post – Mortem. “Nunca se es tarde para honrar a los grandes”, advirtió al respecto el rector de la máxima casa de estudios, Rubén Ibarra Reyes