Miami. El tenista noruego Casper Ruud acabó este viernes con la trayectoria de ensueño del argentino Francisco Cerúndolo en el Masters 1000 de Miami y se citó en la final con el vigente campeón, el polaco Hubert Hurkacz, o la joya española Carlos Alcaraz.
Ruud, número ocho de la ATP, cumplió los pronósticos al batir a Cerúndolo, número 103, por 6-4 y 6-1 y se convirtió en el primer noruego en alcanzar una final de Masters 1000.
El argentino no pudo dar una nueva sorpresa en Miami pero se marcha como el tenista de menor posición en el ranking de la ATP en alcanzar las semifinales de este prestigioso torneo.
"Por supuesto que ahora estoy un poco enfadado pero tengo que ver que las dos semanas enteras han sido increíbles. Creo que jugué mi mejor tenis en estas dos semanas", declaró el bonaerense ante la prensa.
Con un puesto en el Top-50 de la ATP ya asegurado la próxima semana, Cerúndolo aspiraba a ser el cuarto tenista argentino en llegar a la final de Miami, después de los subcampeones Guillermo Cañas (2007), Guillermo Coria (2004) y Alberto Mancini (1992).
Con un gran apoyo desde las gradas del Hard Rock Stadium, el tenista bonaerense sorprendió en el arranque a Ruud al romper su servicio en el primer juego.
El noruego le devolvió el quiebre de inmediato y apoyándose en su potente servicio (seis aces) logró imponerse en el primer set.
Cerúndolo dejó pinceladas de su clase en varias brillantes acciones pero cometió más errores que el noruego en momentos claves de la semifinal.
Al principio "creo que jugué mis dos mejores juegos. Logré un quiebre y tenía ventaja de 2-0, y ahí me puse nervioso", relató. "Fue un poco... aterrador. Después de eso no pude mantener mi servicio".
En el segundo set el argentino desperdició cuatro pelotas de quiebre y acabó tirando la toalla frente a un Ruud lanzado hacia la primera gran final de su carrera a sus 23 años.
"Esto significa mucho para mí. Llegar a una final de Masters era un objetivo", reconoció el noruego, que había perdido sus tres anteriores semifinales en torneos de este nivel.
"Vamos a ver mucho más de Francisco en el futuro, pero mi servicio me ayudó a salir adelante", dijo sobre su rival. "Las condiciones eran bastante duras, muy húmedo, pero estoy contento de llegar a la final".
El noruego, que este año sumó su séptimo título de ATP en Buenos Aires, llegaba a las semifinales pletórico de confianza después de haber apeado el miércoles a uno de los favoritos, el alemán Alexander Zverev.
Torneo de ensueño
La derrota ante Ruud acaba con la espectacular trayectoria de Cerúndolo en Miami, donde se estrenaba en el cuadro principal de un Masters 1000.
Siguiendo los pasos de Juan Martín del Potro, semifinalista en 2018, Cerúndolo fue capaz de eliminar a rivales muy asentados en el circuito, como el francés Gael Monfils (24 de ATP) y los estadunidenses Reilly Opelka (18) y Francis Tiafoe (31), quien había eliminado a su hermano pequeño Juan Manuel en la tercera ronda.
"Gané mi primer partido en un Masters 1000, jugué por primera vez en el cuadro principal, llegué a las semifinales. Gané a los mejores jugadores que he vencido en mi carrera hasta ahora", enumeró Cerúndolo. "Creo que más adelante estaré más contento que ahora, pero ha sido increíble y estoy muy orgulloso de lo que he hecho".
Cerúndolo sigue sin inaugurar su vitrina de títulos de la ATP y su única final fue el año pasado en el torneo de arcilla de Buenos Aires, donde cayó ante su compatriota Diego Schwartzman.
La segunda semifinal la disputarán a partir de las 16H00 locales (20H00 GMT) Hubert Hurkacz, verdugo el jueves del favorito Daniil Medvedev, frente a Carlos Alcaraz, que busca ser el segundo finalista más joven de la historia del torneo a sus 18 años.