Yedá. Los rebeldes yemeníes reivindicaron ayer una serie de ataques con drones y misiles en Arabia Saudita, que provocaron un enorme incendio en una instalación de la petrolera Aramco en la ciudad de Yedá, cerca del circuito de Fórmula 1 que alberga el Gran Premio.
La coalición liderada por Arabia Saudita, que lucha contra los rebeldes hutíes respaldados por Irán, confirmó el ataque, ocurrido en la víspera del séptimo aniversario de su intervención militar en la brutal guerra civil en Yemen. Más tarde informó que lanzó ataques de represalia contra Saná y Hodeida en Yemen.
En un comunicado, la coalición indicó que el fuego provocado por el ataque “ha sido controlado y no ha causado víctimas” señaló su portavoz, Turki al Maliki.
También aseguró que el ataque, que tenía como objetivo “tanques de productos derivados del petróleo” de Aramco, “no tendrá impacto en las actividades en la ciudad de Yedá”, en alusión al circuito de Fórmula 1.
La humareda era visible desde la pista de F1 de esa ciudad, donde varios pilotos participaban en los entrenamientos libres de este viernes. El promotor del campeonato de Fórmula 1 indicó que la carrera seguiría “tal y como estaba prevista”.