Unas 300 hectáreas de la zona de amortiguamiento de la reserva de la biosfera El Cielo, en Tamaulipas (el área natural protegida más importante del noreste de México), han sido consumidas por un incendio, informó ayer la Comisión Nacional Forestal (Conafor); la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) aplicó el Plan DN-III-E en apoyo a la población.

GALERÍA: Incendio sin control en el Parque Nacional El Tepozteco

En tanto, la conflagración en el paraje Los Corredores, ubicado en el Parque Nacional El Tepozteco, en el municipio morelense de Tepoztlán, la cual se inició el martes, ha devastado más de 90 hectáreas de pino-encino y selva baja caducifolia, reportaron autoridades federales, estatales y locales.

En Jalisco, una quema presuntamente provocada empezó poco después de las 13 horas de ayer en la zona conocida como Bajío de Milpillas, en el bosque La Primavera, el pulmón natural del área metropolitana de Guadalajara.

Al menos 80 brigadistas federales, estatales y municipales intentaban extinguir las llamas. Las autoridades emitieron una alerta atmosférica para tres municipios. Un individuo fue arrestado.

En Guerrero, Protección Civil dio a conocer que trabaja en 12 conflagraciones “forestales y suburbanas en varias regiones"; algunas se localizan a orillas de carreteras y en predios baldíos.

En cuanto al fuego en la Reserva de la Biosfera El Cielo, que se inició el 18 de marzo, la Conafor explicó que se han perdido 180 hectáreas de arbustos y alrededor de 120 de hojarasca.

La dificultad para combatir el siniestro, indicó, se debe a lo complicado del terreno, a la conexión de cañones y a las rachas de viento, además de la presencia de un piso de 60 centímetros de material orgánico. Añadió que los daños se ubican a ras de suelo y no en las copas de los árboles adultos.

En el combate al fuego participan cerca de 200 personas, entre ellas voluntarios, elementos de la Sedena, personal de Jaumave, Ocampo, Llera y Gómez Farías, municipios donde está enclavada la reserva de la biosfera, así como trabajadores de la Conafor y de Protección Civil estatal.

Esta última dependencia detalló que las llamas afectan el punto conocido como Joya de Manantiales, en el norte del esa área natural protegida, considerada por la Organización de Nacionales Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) patrimonio de la humanidad y reserva natural.

Elementos del Decimoquinto Batallón de Infantería del Ejército Mexicano, destacamentado en Tampico, se trasladaron a El Cielo por el municipio de Gómez Farías para intentar sofocar las llamas y activar el Plan DN-III-E, informó la Sedena en un comunicado.

El Cielo, enclavada en la Sierra Madre Oriental, tiene una extensión de 144 mil 530 hectáreas y cuenta con cuatro ecosistemas (selva tropical, semidesierto, bosque templado húmedo de niebla y bosque templado de pino).

Considerada una de las maravillas de México, El Cielo alberga a más de 255 especies de aves residentes y 175 migratorias, reptiles, anfibios, murciélagos y animales salvajes, algunos en peligro de extinción, como el jaguar. Varios ejemplares de fauna y fauna son endémicos.

Mientras, el director de Protección Civil de Morelos, Clement Gallardo, informó que en el segundo día del incendio forestal en El Tepozteco, dos helicópteros (uno de la Guardia Nacional y otro de la Fuerza Aérea Mexicana) realizaron 50 descargas de agua para extinguir 60 por ciento del fuego y liquidar 30 por ciento.

Sin embargo, reconoció que los vientos de la madrugada del jueves podrían cambiar la situación. Por ello, continuarán los vuelos de las aeronaves sobre los cerros de esta área natural protegida ubicada en el Pueblo Mágico de Tepoztlán, con el apoyo de más de 400 brigadistas.

Gallardo mencionó que la comunidad indígena de San Juan Tlacotenco y Tierra Blanca es la más cercana a la zona perjudicada, pero aún no hay viviendas afectadas. Las clases de nivel básico se suspendieron.

El alcalde de Tepoztlán, David Demesa, dijo que dos hombres provocaron las llamas; uno huyó y el otro, aparentemente en estado de ebriedad, fue detenido por brigadistas el martes pasado. El individuo, apodado El Pipiolo, es originario de San Andrés de la Cal.

Autoridades federales analizarán si presentan una denuncia penal, pues el presunto responsable que ya fue arrestado también padece de sus facultades mentales.