La aprehensión de tres presuntos líderes de los cárteles del Noreste (CDN), Jalisco Nueva Generación (CJNG) y de Sinaloa, por parte de las autoridades federales, desató la violencia en Nuevo Laredo, Tamaulipas; Colima capital y municipios del sur de Chihuahua, respectivamente, donde miembros de esas organizaciones criminales perpetraron una serie de ataques en vialidades.
En la ciudad fronteriza de Nuevo Laredo, de las 23:30 horas del domingo a las cuatro de la madrugada del lunes, los ciudadanos reportaron a través de redes sociales balaceras, vehículos incendiados, la mayoría tractocamiones con los cuales los presuntos delincuentes bloquearon las principales vías.
En la ciudad de Colima, al menos seis automotores fueron quemados entre la noche del domingo y madrugada del lunes. En Chihuahua, un convoy de 20 camionetas con al menos 50 pistoleros incursionó la tarde del domingo en pequeños poblados y secuestró a cuatro hombres que horas después la autoridad rescató.
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) capturó a Juan Gerardo Treviño Chávez, El Huevo, líder del CDN, sobre quien pesa una solicitud de extradición a Estados Unidos por narcotráfico, además de tres órdenes de aprehensión por asociación delictuosa, homicidio, terrorismo y extorsión.
El capo fue detenido el domingo en Nuevo Laredo, cuando un convoy del Ejército fue atacado cuando hacía un recorrido de reconocimiento por la colonia Hidalgo. Los militares respondieron y lo capturaron. Sus cómplices huyeron.
Con la colaboración de la Fiscalía General de la República (FGR), el Centro Nacional de Inteligencia y la Guardia Nacional, se determinó que se trata del líder del CDN y del grupo de sicarios Tropas del Infierno, herederos de los procedimientos violentos del cártel de Los Zetas, generador de violencia en cinco estados del país y en la región de la frontera chica de Tamaulipas, detalló la Sedena.
Treviño Chávez es sobrino de Miguel Ángel Treviño Morales, El Z-40, fundador de Los Zetas, brazo armado del cártel del Golfo. Cuando El Huevo fue detenido portaba dos armas de uso exclusivo de las fuerzas armadas.
Su captura provocó la reacción de los miembros de la organización criminal que encabeza, quienes durante más de cinco horas y media cometieron diversos actos delictivos como balaceras contra instalaciones militares y en las inmediaciones del Consulado de Estados Unidos.
Los pistoleros del CDN utilizaron ponchallantas para frenar vehículos, incendiarlos y con ello tratar de impedir que los elementos federales trasladaran al narcotraficante.
Sin embargo, los soldados lo subieron a un helicóptero para trasladarlo a la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada, en la Ciudad de México, donde fue sometido a una revisión médica e interrogado y en unas horas será presentado ante un juez.
El Consulado General de Estados Unidos en Nuevo Laredo exhortó a los ciudadanos de ese país a buscar refugio y suspendió las citas para visas. En tanto, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza del vecino país cerró la circulación en los dos Puentes Internacionales y la reanudó a las siete de la mañana.
Según Ap, el embajador de Estados Unidos, Ken Salazar, expresó al gobierno mexicano su grave preocupación
por lo ocurrido.
Escuelas suspendieron clases presenciales, mientras el transporte urbano quedó parcialmente paralizado. Comerciantes informaron que no habría entrega de productos a domicilio y algunos cerraron.
Al cierre de esta edición no había reporte oficial sobre personas heridas o muertas. La Sedena informó que se enviaron fuerzas federales a esa localidad limítrofe con Laredo, Texas, para reforzar la seguridad.
Miguel Jarquín, El Chaparrito, señalado como líder del CJNG en Colima y objetivo prioritario
de autoridades de México y Estados Unidos, fue arrestado el domingo en Zapopan, Jalisco, por efectivos de la Marina y de la FGR.
Jarquín es considerado uno de los principales generadores de la violencia que inició el 7 de febrero con enfrentamientos entre el CJNG y el grupo delictivo Los Mezcales, en varios municipios del estado, principalmente en la zona conurbada Colima-Villa de Álvarez, que han dejado un saldo de al menos 89 muertos.
En represalia por su aprehensión, miembros de esa organización criminal quemaron seis vehículos de carga desde las 23 horas del domingo hasta madrugada del lunes, en el libramiento Ejército Mexicano y la carretera que conduce a Ixtlahuacán, entre otras vialidades.
En Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, las fuerzas federales detuvieron a Antonio Leonel C. M., de nacionalidad estadunidense y conocido como El 300 o Bin Laden, señalado como cabecilla del grupo criminal Gente Nueva, brazo armado y operativo del cártel de Sinaloa en Chihuahua.
El 300 es considerado como el principal generador de violencia en el sur de la entidad. Se le atribuyen secuestros y otros delitos.
Luego de su arresto, en la fiscalía de Chihuahua se recibieron reportes de habitantes de que entre las 17 y 21 horas del domingo un convoy de 20 camionetas con sujetos fuertemente armados y encapuchados transitó por la carretera de Jiménez al pueblo de Allende e incursionó en comunidades pequeñas.
En el poblado de Coronado secuestraron a tres hombres y en Allende a uno. Corporaciones de seguridad dieron con el paradero de estas personas, quienes rehusaron presentar denuncias.
Con información de Eduardo Murillo