Integrantes de colectivos de búsqueda de personas de Jalisco, realizaron en la glorieta de los desaparecidos en Guadalajara la primera de dos jornadas para recabar insumos que les permitan continuar con las brigadas y el rastreo de restos humanos en fosas clandestinas, tal como lo hicieron a finales de enero, cuando lograron en seis días encontrar al menos el 10 por ciento de cadáveres que en 2021 no hallaron las autoridades en Jalisco.
La ciudadanía les regaló palas, picos, agua y cubrebocas, mientras las representantes acusaron la falta de efectividad y apoyo de la Fiscalía del Estado, por lo que ellas tienen gestionar las ayudas, al mismo tiempo que exigen a las autoridades que les brinden acompañamiento sobre todo para seguridad, “a pesar que a ellos les pagan y tienen herramientas mucho más sofisticadas”.
Araceli Hernández Márquez, del colectivo Madres Buscadoras de Jalisco, dio a conocer que el domingo también se instalará la jornada de 10 a 14 horas y que la respuesta ciudadana abre la esperanza para que en los primeros días de abril, cuando se reanude el brigadeo (que será permanente en el estado por el éxito que se obtuvo en febrero), un mayor número de familias de víctimas de desaparición también se sumen a las búsquedas.
“Estamos haciendo el trabajo de fiscalía que son los que tendrían que andar con sus caninos y drones, haciendo su trabajo, pero nosotros les hacemos más de la mitad de ese trabajo”, afirmó.
Bajo una pequeña carpa instalada en la glorieta, mientras juntaban lo que la gente se acercaba a entregarles para apoyar la causa, una activista y madre de un desaparecido dijo que le parecía falsa la información que difundió la fiscalía respecto a que en un corte preliminar se había determinado que las buscadoras en febrero encontraron 28 cadáveres.
“El organismo siempre va a decir lo que le conviene, pero nosotras nos dimos cuenta, somos las que estuvimos trabajando esos puntos, ellos nomás se dedicaron a sacar y ya, no tienen ninguna delicadeza con las familias. Para dar una idea: ¿cuánto tardan en entregar un cuerpo luego que lo desentierran? Faltan muchísimos más de los que dicen, ahorita van 88 bolsas, es ilógico que sean nomás 28 cuerpos”, puntualizó.
Afirmó que lo más notorio es que lograron encontrar las fosas clandestinas en Tlajomulco y una en Villa Corona “con muy poca herramienta” y lamentó que la fiscalía no los apoyó ni con palas, solamente con seguridad “que es su trabajo y lo hicieron después que hablamos con el gobernador (Enrique Alfaro)”.
Rosaura Patricia Magaña Rivera, del colectivo Entre el Cielo y la Tierra comentó: “Vamos a hacer una programación de las búsquedas más seguido, prospectar los puntos pendientes para que no quede aquí el trabajo de las madres buscadoras de Sonora (que estuvieron en Jalisco en febrero), para estatalmente todos esos puntos seguir trabajando una o dos veces al mes, dependiendo de cómo se dé la colaboración ciudadana y la de las autoridades”.
Denunciaron que “no hay mesas de trabajo con los familiares desde que salió la maestra Teresa (Medina Villalobos, quien sólo duró dos meses en el cargo en 2017 antes de renunciar), necesita uno estar buscándolos a ellos, hablando, yendo y yendo para que le den a uno una cita, cuando tendría que ser la autoridad la que se acerque. Nadie nos habla por teléfono para decirnos que encontraron algo en la investigación, nosotros tenemos que ir porque ellos no tienen el espacio para atendernos”.
Exigen a Fiscalía de Jalisco que colabore en la investigación
Este sábado también en Jalisco se realizó una marcha para que las autoridades estatales se involucren en la localización de tres ingenieros informáticos desaparecidos la semana pasada cuando fueron a Michoacán ainstalar software en una empresa en la región aguacatera del vecino estado.
Ayer se cumplieron diez días de la desaparición de los tres profesionales, entre ellos una mujer, cuando se dirigían a Tancítaro, Michoacán, a realizar un trabajo a una empresa aguacatera; a la fecha no hay rastro de ellos.
En Michoacán, se dio a conocer que las autoridades estatales iniciaron la búsqueda por toda esa zona aguacatera que incluye a Uruapan.
Familiares de los tres ingenieros, explicaron que iban a Tancítaro a instalar un software y soporte de cómputo para una red de antenas.
Erika Polanco Camarena, de 28 años, quien iba acompañada por sus compañeros David Reyes Betancourt, de 42 y Édgar Delgadillo Rodríguez, de 28, tuvo contacto con su familia el 22 de febrero, aproximadamente a las 17 horas. Viajaban en una camioneta Chevrolet Trax, placas JRS4311 de Jalisco.
Por lo que todo parece indicar que los tres profesionistas regresaban de Uruapan rumbo a Jalisco, cuando desaparecieron, señalaron los familiares de Erika.
El 25 de febrero, se denunció la desaparición ante la Fiscalía Jalisco, y según información de las líneas telefónicas, los tres se encontraban en Tancítaro, por lo que pidió a la Fiscalía Especializada para la Investigación y Persecución de los Delitos de Desaparición Forzada de Personas y Desaparición Cometida por Particulares, que se hiciera cargo del caso.