Lima. El presidente peruano, el izquierdista Pedro Castillo, acusó a la fiscalía de sumarse a los intentos de la oposición conservadora de desestabilizar su gobierno, tras difundir la prensa la declaración de una empresaria que lo involucra a una presunta red de corrupción.
"Esto evidencia que la fiscalía estaría formando parte de un complot para desestabilizar al Gobierno", dijo Castillo en breve mensaje al país por televisión luego de la filtración a los medios de la denuncia que lo salpica.
"Hay un sector minoritario que nunca aceptará nuestro gobierno popular y democrático (...) Hoy buscan vacarnos (destituirnos) para no solucionar los grandes problemas que tiene nuestra patria", aseguró.
"Desmienta o renuncie, presidente", tituló en portada este domingo el diario La República.
"Rechazo categóricamente" las declaraciones de la empresaria, dijo Castillo en su mensaje de 120 segundos.
Castillo ya había denunciado el sábado un intento de golpe de estado desde el Congreso por este caso, por lo cual pidió activar la Carta Democrática de la Organización de los Estados Americanos (OEA).
"Llamo a la comunidad internacional y al pueblo peruano para activar la Carta Democrática Interamericana y permanecer atentos contra cualquier intento desestabilizador y de golpe en el país", indicó Castillo en su cuenta de la red Twitter.
El presidente sostuvo el sábado que la empresaria Karelim López "ha brindado a la Fiscalía declaraciones sin sustento jurídico ni coherencia con la verdad que amenazan la ética y la transparencia de los procedimientos de toda investigación".
Según la prensa, la empresaria, que es investigada por su presunta participación en delitos de corrupción, implicó al mandatario en declaraciones ante la Fiscalía acerca de las actividades de una supuesta organización criminal enquistada en el gobierno.
El objetivo de dicha organización, que estaría infiltrada en diversos ministerios y el Congreso, sería obtener dinero con las licitaciones de obras públicas, dice el diario La República.
"Lo más relevante de la declaración es que afirma que el presidente Pedro Castillo es parte de una mafia que opera en el Ministerio de Transportes y Comunicaciones direccionando licitaciones del sector", indicó por su parte el diario El Comercio tras señalar que la empresaria declaró el 18 de febrero ante la fiscal de lavado de activos Luz Taquire.
López figura en una investigación que involucra asimismo a Castillo, por presuntamente haber "intervenido -indebida e indirectamente-" en un proceso de licitación pública para la construcción de un puente vehicular sobre el río Huallaga, en la región de San Martín, en el norte de Perú.
Castillo, de 52 años, ganó en junio pasado las últimas elecciones al frente de un pequeño partido marxista-leninista con 50.12 por ciento de los votos, en un reñido balotaje contra la derechista Keiko Fujimori.