Ciudad de México. El amor a la música y la amistad fue lo que más se notó entre los asistentes en el Carnaval Bahidorá 2022, celebrado este fin de semana en el parque natural Las Estacas, Morelos. Durante tres días de fiesta se dio inicio a la avalancha de conciertos que se realizarán en el país este año.
Después de ser suspendido en 2021 por la pandemia del covid- 19, para esta edición los organizadores ofrecieron una lista de talento de diferentes géneros, que fueron desde el techno de la década de los 90, hasta el actual “perreo intenso”, que amenizaron el rencuentro del publico a un concierto masivo de manera presencial.
También se celebró el décimo aniversario del carnaval, que inició junto a la fiesta por los treinta años del club alemán de música electrónica, Tresor; en el escenario El Umbral, la dj mexicana Parrua, el colombiano Verraco y la jamaicana TygaPaw fueron quienes destacaron esa noche y pusieron a bailar a los asistentes hasta las últimas horas del viernes.
Para la mañana del sábado, la fiesta continuó con la cumbia de la Agrupación Cariño, que con su ritmo ayudó a soportar el calor que empezaba a incrementarse; muchos de los jóvenes, que acamparon en Las Estacas no perdieron el tiempo de disfrutar de las albercas que ofreció Bahidorá, en una de ellas se presentó Caloncho con un acto acústico que lleno de tranquilidad al publico.
Por la tarde de ese día, el saxofón de la londinense Nubya García cimbró el sistema de sonido y dejó al público preparado para el recital de Kings of Convenience, uno de los actos esperados del carnaval. Bajo unas sombrillas blancas Erlend Øye y Eirik Glambek Bøe, integrantes de esa banda noruega, amenizaron el escenario principal con el sonido suave de sus guitarras.
Desde Jamaica, la compositora y cantante Coffee aportó el ritmo de reggae al carnaval y al mismo tiempo, con su talento, confirmó porque es bien recibida entre los jóvenes. Ya para la noche del sábado, la música explotó como en un night club de los años 90, con la participación de Black Box, que con sus icónicos temas Everybody, Everybody y Strike It Up y la voz de Katrin Quinol, quien se le agradece su esfuerzo sobre el escenario estando embarazada, convirtieron el pasto del escenario Sonorama en una gran pista de baile.
Con ritmos tropicales mezclados con rap y hip hop en los actos de Pahua, Sofía Gabanna, Esa mi Pau, la toma de los controles de los colectivos Chingona Sound y Nochenegra, siguió el baile y la celebración en el carnaval
La noches del viernes y sábado se iluminaron con la luz ámbar de los focos en las áreas comunes para comer y descansar, en tanto se encendía la fogata, que fue el lugar idóneo para que algunas personas se rencontrasen con amigos que no se veían desde el 2020.
En todo momento el personal de limpieza levantaba colillas de cigarros, otros recolectaban las latas o pet de los contenedores, así evitaron la acumulación de basura en los caminos y escenarios. Esos trabajadores comentaron a este medio que separan la basura para repartirla a diferentes empresas recicladoras, “es un trabajo pesado”, agregaron. Así concluyó el Carnaval Bahidorá que promete regresar, si no aparece otro confinamiento, para el siguiente año.