Nueva York. Las probabilidades de que la campaña regular de las Grandes Ligas se inaugure el 31 de marzo, como está previsto, parecieron reducirse el jueves, cuando las conversaciones para poner fin al paro patronal duraron apenas 15 minutos, luego de una interrupción de cuatro días.
Lo que supuestamente iba a ser el segundo día de los entrenamientos de primavera, fue en vez de ello el día 78 de la segunda interrupción más larga de labores en la historia de las Grandes Ligas (MLB).
Después de lo que fue apenas el sexto encuentro sobre temas económicos torales desde que el paro comenzó el dos de diciembre, las partes tuvieron interpretaciones distintas sobre la brevedad de la reunión.
El sindicato dijo que la duración no tenía mucho significado, mientras que los dirigentes de los clubes atribuyeron la fugacidad al hecho de que no había nada de qué hablar.
Aunque hay una sesión pautada para este viernes sobre temas secundarios, no se ha fijado una fecha para reanudar las conversaciones principales. A las dos partes les restan aproximadamente dos semanas para llegar a un acuerdo que permita una pretemporada suficientemente larga antes de una campaña normal.
“Simplemente espero que algo se pueda resolver rápidamente”, dijo el pelotero de cuadro de los Yanquis, DJ LeMahieu, antes del duelo y poco después de entrenar con su compañero Aaron Judge en un campo colegial de Tampa, Florida. “El béisbol se vuelve un negocio. No es tan divertido, pero definitivamente es algo que debe ocurrir”.
En este punto, MLB no ha reconocido públicamente siquiera que los duelos de pretemporada no iniciarán el 26 de febrero, como estaba programado. El sindicato dijo a MLB que estaba dispuesto a sostener reuniones diarias la semana próxima.
No hubo discusiones sobre asuntos clave, como el impuesto al lujo, incluidos sus montos y el tope para aplicarlo; el salario mínimo; la propuesta del sindicato, de reducir la compartición de ingresos, y las acusaciones de los peloteros, quienes consideran que los dueños han manipulado su tiempo de servicio.
Las dos partes siguen muy distanciadas en todas esas áreas y en la postemporada. Los dueños quieren ampliar los playoffs de 10 a 14 clubes, mientras que los jugadores ofrecen 12.
Una comitiva de tres representantes de MLB, encabezada por el subcomisionado Dan Halem, se presentó a las oficinas del sindicato poco antes de la una de la tarde para la sexta sesión de negociaciones sobre temas económicos desde que la novena paralización en el deporte empezó el dos de diciembre.
El sindicato desistió de su pedido para que todos los jugadores con dos años de servicio en las mayores sean elegibles al arbitraje salarial y en cambio propuso expandir la categoría “super dos” — jugadores con menos de tres años de servicio en las mayores — de 22 por ciento al 80 por ciento.
Como parte de la propuesta, el gremio incrementó el monto del fondo para el bono de bonificación previo al arbitraje, de 100 millones de dólares a 115 millones.
Los clubes ofrecen 15 millones.
El gremio también planteó incrementar la cantidad de peloteros que serían elegibles para el bono de bonificación, de 30 jugadores a 150.
Halem y Bruce Meyer, principal negociador del sindicato, sostuvieron un encuentro aparte de 20 minutos tras la sesión, y que fue descrito como inusualmente franco.
Ante la necesidad de entre 21 y 28 días de entrenamiento y tiempo adicional para presentarse y pasar por los protocolos contra el covid-19, se requiere un acuerdo para finales de febrero o principios de marzo para que la temporada inicie a tiempo.
Las Grandes Ligas se siguen oponiendo a cualquier extensión en las condiciones en que un pelotero puede ir al arbitraje salarial. Rechazan también la reducción en la compartición de los ingresos.