Los Ángeles. La edición 56 del Supertazón promete hoy emociones fuertes en el flamante SoFi de Los Ángeles ante 70 mil espectadores: el duelo del veterano Matthew Stafford contra el joven Joe Burrow, gana-dor del trofeo Heisman 2019, será por demás interesante entre dos mariscales que se estrenan por primera vez en el gran escenario para levantar el Vince Lombardi.
Burrow tiene la oportunidad de ingresar en un selecto club de pasadores que han sido campeones universitarios y del Supertazón como titulares, y con el mismo nombre: Joe Montana y Joe Namath.
En el caso de Carneros, Matthew Stafford puede reivindicarse después de permanecer 12 tempora-das en los Leones de Detroit, donde sus actuaciones se vieron opacadas por los fracasos colectivos.
Sean McVay, quien a sus 36 años puede convertirse en el entrenador más joven en ganar un Supertazón, le dio una segunda oportunidad en Los Ángeles al sacarlo hace un año de Detroit a cambio de Jared Goff.
Stafford ha coronado una excelente temporada regular con tres soberbios partidos de playoffs. El veterano de 13 campañas está en el tope de sus capacidades. Si pasa para 315 yardas, tendrá la postemporada más productiva en la historia de la NFL.
El mariscal puede apuntar hacia Cooper Kupp, el mejor receptor abierto de la NFL esta campaña, y el carismático Odell Beckham Jr. Además, la línea defensiva y sus linebackers son notablemente superiores a la ofensiva de los Bengalíes, que los pone favoritos para dar el título a esta ciudad en 38 años. En la plantilla todavía permanecen jugadores que cayeron en el Supertazón de 2019 ante los Patriotas de Inglaterra de Tom Brady.
Joe Burrow, a su vez, ha sido capaz de conducir a Cincinnati a su primera aparición en el Supertazón desde 1989. Un triunfo de los Bengalíes sería la cereza del pastel para una de las reconstrucciones más veloces y exitosas de la historia.
Cincinnati no clasificaba a playoffs desde 2015 y apenas dos años atrás terminaron con el peor balance de la Liga, con 2 victorias y 14 derrotas.
La transformación de los Bengalíes se produjo bajo el mando de otro joven entrenador, Zac Taylor, y especialmente con la dirección en el campo de Burrow, elegido con el número uno del draft de 2020.
Tras terminar líderes de la División Norte de la Conferencia Americana (10-7), Cincinnati fue tumbando favorito a favorito en los playoffs.
Entre sus víctimas estuvieron Titanes de Tennessee, cabeza de serie de la Americana, y Jefes de Kansas City, vigentes subcampeones.