Ciudad de México. Aurora, de 28 años, se contagió en la primera ola de covid-19 y aún enfrenta múltiples secuelas. En tres meses se cumplen dos años de que me contagié, pero me fue peor con las consecuencias. Sufro daño renal, broncoespasmos, inflamación de oídos, caída de cabello y alergias. Mi sistema inmune se volvió loco
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También presenta niebla mental, que de acuerdo con expertos en neurología de la Universidad de Columbia, Estados Unidos, es un síndrome neurológico que genera pérdida de memoria, problemas para asociar palabras con los objetos, falta de concentración y dificultad para realizar labores simples.
La doctora en neurociencias Lucía Ledesma Torres, jefa nacional de Salud Mental de la Dirección Normativa de Salud del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste), dijo que se estima que cerca de 15 por ciento de las personas que han tenido covid-19 enfrentarán secuelas neurológicas, neurosiquiátricas y neurocognitivas.
En entrevista con La Jornada, señaló que quienes presenten estos síntomas deben permanecer en seguimiento preventivo y hacerse una exploración general después de la infección. En el caso de la variante ómicron, los malestares suelen ser, aunque no es la generalidad, más leves, y en ese sentido los efectos neurosiquiátricos, neurocognitivos y neurológicos no son tan patentes, pero falta investigación al respecto
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A mediados de 2020, la Organización Panamericana de la Salud emitió la primera alerta epidemiológica sobre las complicaciones y secuelas neurológicas del covid-19. Señaló que las afectaciones no sólo son a nivel pulmonar, también hay daño al sistema nervioso central.
Sin embargo, fue hasta octubre pasado cuando la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó la primera definición clínica oficial de la enfermedad poscovid-19, la cual incluye fatiga, dificultad para respirar, disfunción cognitiva y otros síntomas que repercuten en el funcionamiento cotidiano.
Janet Díaz, jefa de Gestión Clínica de la OMS, indicó que las secuelas “pueden ser de nueva aparición tras la recuperación inicial de un episodio agudo, o bien, pueden persistir desde el inicio de la enfermedad. Además, los síntomas también pueden fluctuar o puede haber recaídas con el tiempo".
Antonio tiene 27 años y en enero de 2021 se contagió. No tuve una enfermedad grave, apenas sentí molestias, pero al cuarto día perdí el olfato y la audición del lado izquierdo, la cual recuperé semanas después; pero no he vuelto a oler como antes. Los médicos no saben explicar qué tengo. Nadie puede decirme si volveré a tener un olfato normal, además me siento cansado
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Javier, de 40 años, quien presentó síntomas moderados en marzo pasado, señaló: salí sin problema de la infección, pero a los pocos días me dí cuenta de que olvidaba palabras básicas como mesa, puerta, vaso. Sabía qué eran, pero había olvidado cómo pronunciarlas. Ha pasado casi un año y estos episodios se han reducido, pero no han desaparecido del todo
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El Instituto Mexicano del Seguro Social reportó 220 mil 907 personas con secuelas poscovid atendidas hasta el tercer trimestre de 2021, con afectaciones físicas y mentales. Algunas de las molestias que presentan los pacientes son: falta de aire, dificultad para respirar, cansancio o fatiga luego de actividades físicas de bajo impacto, tos, dolor en el pecho, cabeza o muscular; palpitaciones, problemas de memoria, de concentración o para dormir.