Ciudad de México. “Aún con un diagnóstico en la mano de cáncer o un tumor”, un paciente debe esperar “de cinco a siete meses para que inicie tratamiento, nuestro sistema de referencia es muy tardado”. Ello se evitaría si existiera un “código cáncer”, expuso Óscar Arrieta, coordinador de la Unidad Funcional de Oncología Torácica y jefe del Laboratorio de Medicina Personalizada del Instituto Nacional de Cancerología (Incan).
En vísperas del Día Mundial de Lucha contra el Cáncer (4 de febrero), Arrieta destacó que así el diagnóstico integral se haría en “solo tres a cuatro semanas”, e iniciar terapia, lo que redundaría en una mayor sobrevida para el paciente, pero también se tendría un menor costo de atención, pues mientras más avanzado está el cáncer se deben destinar mayores recursos al tratamiento.
En conferencia de prensa virtual, organizada por la Asociación Mexicana de Lucha contra el Cáncer, criticó que en el país las aprobaciones de medicamentos oncológicos tarden de “tres a cuatro años”, cuando ciertos fármacos ya se usan en otras latitudes y consideró que también existe un tamizaje insuficiente.
En América Latina, una de cada tres personas serán diagnosticadas con cáncer en su vida, y 70 por ciento de los decesos por cáncer ocurren en países en desarrollo, pese a que entre 40 y 60 por ciento de éstos son prevenibles, reduciendo y eliminando el tabaquismo y la obesidad.
En México es la tercera causa de muerte, refirió el experto del Incan, el cual dijo que “muchos sistemas de salud se han enfocado en tratar la pandemia, pero no podemos retrasar ni el diagnóstico ni el tratamiento de cáncer” y dijo que es necesario contar con un registro nacional de cáncer para mejorar la política pública en la materia y que las compras de oncológicos sean “decisiones basadas en farmacoeconomía”, y así los medicamentos que se adquieran sean “altamente efectivos y costo-eficientes” e insistió en que se requieren “protocolos se atención en cáncer.
Mayra Galindo, presidenta de la agrupación civil, que este año cumple medio siglo de existencia, demandó que el sistema de salud sea “más justo y equitativo”, pues las personas que tienen algún tipo de cáncer “padecen un víacrusis, incluso desde antes de ser diagnosticadas (…) el prediagnóstico puede tardar meses (...) No podemos quedarnos con los brazos cruzados, porque hay muchas formas de mejorar esto” y mencionó que debe haber un “registro nacional de cáncer y un plan de control de cáncer”, por eso “tenemos la iniciativa de código cáncer, para diagnosticar en 30 días y empezar tratamiento en 90 días”.
El onco-hematólogo, Alvaro Cabrera responsable de la Clínica de Leucemias Agudas del Hospital Regional de Alta Especialidad Ixtapaluca, mencionó que en la cuarta ola de contagios, “un tumor hematológico es una urgencia”, por lo cual “no puedes esperarte” a la atención, y dijo que las neoplasias hematológicas son más frecuentes en infantes (42.6 por ciento).
La senadora panista, Alejandra Reynoso, quien padece cáncer, aseguró que los tratamientos oncológicos deben quedar fuera de las compras consolidadas de medicamentos. “Las compras UNOPS no han dado resultado”.