Nueva York. Una editora del New York Post, cuya salida de ese medio se anunció el martes, alegó que fue despedida dos meses después de revelar a un ejecutivo que el ex editor Col Allan la había acosado sexualmente.
El diario dijo que cualquier insinuación de mala conducta relacionada con el anuncio de la salida de Michelle Gotthelf por parte de su editor en jefe, Keith Poole, carece de fundamento.
Poole, quien, de acuerdo con Gotthelf, la despidió después de más de dos décadas en el Post, es uno de los acusados en la demanda que interpuso el martes, junto con Allan, la compañía editorial del periódico y el propietario corporativo News Corp.
El acoso de Allan hacia ella “llegó a su punto más álgido” en el otoño de 2015, cuando era editora del periódico, según Gotthelf. Ambos estaban tomando unas copas después de una cena con editores cuando Allan le dijo “deberíamos acostarnos”, declaró en la demanda.
Agregó que Allan se volvió hostil cuando rechazó su propuesta. Se quejó con sus superiores y con el departamento de recursos humanos, y alegó que Allan se vio obligado a retirarse poco después.
Sin embargo, volvió como consultor en 2019. Gotthelf señaló que su relación siguió siendo tensa, mientras ella veía cómo se erosionaba su influencia y estatus en la redacción. Contó que en 2019, Allan le ordenó que eliminara del sitio web del New York Post una historia sobre las acusaciones de la periodista E. Jean Carroll acerca de que había sido violada por el entonces presidente Donald Trump. Trump negó las acusaciones y, según la demanda, Allan afirmó que las acusaciones de Carroll carecían de fundamento.
En noviembre de 2021, durante una comida para hablar de un contrato que iba a expirar pronto, Gotthelf dijo que Poole le preguntó ”¿qué pasó entre tú y Col?”. Ella respondió que Allan le había hecho una insinuación.
Afirmó que Poole la despidió “sin motivo” el 12 de enero.
“Cualquier indicio de delito relacionado con los cambios de gestión anunciados hoy carece de fundamento”, indicaron el New York Post y News Corp. en un comunicado.
The Associated Press no suele nombrar a las personas que dicen ser víctimas de acoso sexual, a menos que hablen públicamente, como ha hecho Gotthelf.