En un informe Análisis de Contexto sobre las desapariciones de personas ocurridas en el estado de Nayarit entre 2011 y 2017, la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB) planteó que las desapariciones masivas ocurridas entre junio y septiembre de 2017 en esa entidad, se presentaron en el marco de la violenta disputa por el control territorial entre grupos del crimen organizado, en la que se practicó un modelo de “limpia de plaza” que se recrudeció tras diversas coyunturas como la detención del ex fiscal Edgar Veytia Cambero en marzo de ese año.
Expuso que las desapariciones “son sólo un indicador del régimen de terror que imperó en esa entidad” durante esos años, en los que era gobernador Roberto Sandoval Castañeda detenido en junio de 2021.
En el documento se establece que entre 2011 y 2016 en Nayarit operó “una alianza” entre el cartel de los Beltrán Leyva y “la estructura criminal” construida por el entonces jefe del Ejecutivo local el ex fiscal Veytia Cambero, actualmente preso en Estados Unidos.
“Como parte de ese pacto, desde el estado nayarita se protegía a ese grupo criminal y se eliminaba a integrantes de las organizaciones contrarias que acechaban la plaza, particularmente el cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Su recompensa no sólo era monetaria, sino permitía también ensalzar al gobierno en el combate contra el crimen organizado”, indicó en el informe.
La CNB precisó que las autoridades nayaritas no detenían ni ejecutaban a los líderes de las bandas criminales, “sino a las personas más vulnerables dentro de la cadena de distribución de drogas: las relacionadas con el narcomenudeo. Esa práctica responde a un modelo de limpieza social, que explica las violencias ejercidas contra éstas el marcado de ese periodo”.
Asimismo, destacó que en febrero de 2017, Veytia Cambero le retiró su apoyo al cartel de los Beltrán Leyva para asociarse con el CJNG, lo que fue visto por los primeros como una traición y buscaron llevar a cabo acciones en contra de la fiscalía, lo que ocurre cuando ésta “se debilita y pueden atacar a las personas que ellos consideraban que estaban directa e indirectamente relacionadas con el grupo ejecutor” en la distribución de drogas de dicha institución.
“Desde entonces la disputa por el territorio nayarita sigue activa y posiblemente parte de la estructura criminal de la fiscalía siga operando con alguna de las organizaciones criminales”.
En el análisis de contexto, elaborado en coordinación con la Comisión Estatal de Búsqueda de Nayarit, y que se da también en el marco de las 47 acciones urgentes que emitió el Comité contra la Desaparición Forzada de las Naciones Unidas (CDF), la CNB advirtió que de 2011 y hasta 2016, las cifras de desaparición en Nayarit se habían mantenido en un promedio de 16 personas desaparecidas por año, sin embargo a partir de 2017 y hasta 2020, el promedio anual fue de 206.
Destaca que de las 47 personas desaparecidas con acción urgente, nueve han sido localizadas sin vida en, al menos, tres fosas clandestinas, cuyo hallazgo se realizó entre 2017 y 2020.