Ciudad de México. La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, consideró que instituciones educativas como la UNAM deben valorar qué impacto tiene que los jóvenes que estudian una carrera universitaria no asistan a sus aulas desde hace dos años.
Luego de reiterar que no es necesario suspender las clases ante el incremento de contagios por covid-19, señaló que la máxima casa de estudios del país tiene dos años cerrada, aun cuando ahí ya están todos inmunizados.
Ahora se está vacunando a personal educativo con otra dosis, incluso los estudiantes de todas las edades ya prácticamente han sido vacunados.
Agregó que la UNAM es una gran institución y se confía en ella, al ser la universidad de la nación, pero insistió en que se debe reflexionar entre todos el impacto de que durante dos años no se asista a clases presenciales
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Expresó que también en el caso de la educación básica se debe preguntar qué ha significado para una generación de niños y niñas no haber asistido año y medio a la escuela.
Aseguró que si se viera un riesgo, en este caso los científicos, las autoridades de salud y las educativas, se tomarían otras decisiones, pero que es muy importante también la recuperación escolar de los estudiantes de la ciudad.
Por eso es esta decisión que se toma en coordinación con la Secretaría de Salud; no es la jefa de Gobierno que instruye que haya clases, es un comité científico y uno de salud que toman esta decisión tomando en cuenta todos los indicadores que están ocurriendo en la ciudad, igual que en otros estados de la República.
Dijo que la orientación de la Secretaría de Educación Pública es mantener las clases, por lo que su gobierno apoyará en lo que se requiera, como facilitar los filtros sanitarios y el uso de cubrebocas.
La mandataria afirmó que no hay saturación de nosocomios en la ciudad, pues incluso el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER), que atiende a los pacientes de mayor gravedad, cuenta con lugares, pero todos los días se revisan las cifras.
Comentó que en las ciudades de otros países donde ha aumentado de manera importante el número de hospitalizados con la variante ómicron, tiene que ver con los bajos niveles de vacunación.
También señaló que insistirá en el llamado a que los empleadores no pidan la prueba de covid-19, para que sus trabajadores puedan ausentarse y así evitar las largas filas en los kioscos y centros de salud.
Por otra parte, informó que salió negativa a la prueba que se realizara luego de haber estado en contacto con el presidente, Andrés Manuel López Obrador, quien se contagio de coronavirus.