Ciudad de México. La Secretaría de Movilidad llevó a cabo la chatarrización de 228 taxis que cumplieron su vida útil, una vez que sus propietarios adquirieron un crédito para la compra de un vehículo eficiente o híbrido, cuyos costos oscilan entre 250 mil y 300 mil pesos, y competir en mejores condiciones con los servicios a través de plataformas digitales, informó la directora técnica y de órganos desconcentrados, Lidice Rocha.

Hasta el momento, destacó, se han entregado mil 100 apoyos del Fideicomiso para el fondo de promoción para el financiamiento del transporte, que contó para el año pasado con un presupuesto de 30 millones de pesos, los cuales van de 75 mil a 100 mil pesos, para igual numero de concesionarios.

Se trata, dijo, de apoyarlos en la renovación de sus unidades, pues al no hacerla a los 10 años, dejan de prestar servicio, porque ya no pasan la revista físico-mecánica, aunque “se trata de un gremio muy cumplidor, que muchas veces antes de ese lapso y con recursos propios, adquiere un préstamo a cinco o seis años con una tasa de interés de siete por ciento, para cambiar su taxi”.

Durante el ingreso a la planta de chatarrización de taxis, que tardó casi tres horas, reconoció que la pandemia redujo las metas de renovación del año pasado, pues de aprobarse 374 créditos, solo se entregaron 228, por cuestiones de buró de crédito, ya que los concesionarios no pudieron conseguir su constancia y por lo tanto no pudieron acceder a este beneficio, que es a fondo perdido.

Los concesionarios pueden pagar de contado el valor del vehículo, pero en la mayor parte de los casos, les conviene muchísimo más conseguir un crédito, porque se les entrega adicionalmente un bono de 75 mil pesos para un vehículo eficiente -que contamina menos que tiene un mayor rendimiento de gasolina- y 100 mil para un híbrido o eléctrico, y esta la contra garantía que aporta Nacional Financiera.

Dicha contra garantía opera en casos de impago a partir del cuarto mes, precisó la funcionaria al señalar que el no ser sujetos de crédito, porque no tienen ingresos fijos que los respalden, no es un impedimento para acceder a un crédito, porque se pueden acercar a las instituciones bancarias que trabajan con Nafin.

De una flota de 140 mil unidades, una séptima parte, alrededor de 20 mil requieren renovarse, por lo que este año se espera apoyar a 400, con lo que sumarán mil 500 en estos cuatro años de la actual administración, pero se espera terminar el sexenio con el apoyo a 2 mil 200 concesionarios, en promedio, estimó.

Por su parte, los propietarios de los taxis esperaron en fila su ingreso a la planta de chatarrización Derichebourg Recycling México, ubicada en Santa Clara, municipio de Ecatepec, para darle el último adiós a sus compañeros de batalla, que en cuestión de minutos terminó en lámina triturada, con un valor de mil pesos, recursos que se irán al fondo de financiamiento para continuar con el apoyo a concesionarios.