Ciudad de México. Si el gobierno federal otorga visas humanitarias o residencias a los integrantes de la caravana migrante, ésta se disolverá en la Ciudad de México.
Para ello, con la mediación de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), ya se buscan reuniones con las secretarías de Gobernación y de Relaciones Exteriores, con el Instituto Nacional de Migración (INM) y la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar); además del acompañamiento de la Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH).
Así lo dio a conocer el líder de la organización Pueblo Sin Fronteras y organizador de la caravana, Irineo Mujica, luego de una reunión con la presidenta de la CNDH, Rosario Piedra Ibarra.
Detalló que dentro del contingente, conformado por 321 personas de acuerdo con autoridades de la Ciudad de México, hay personas que desean quedarse en México y otras que quieren seguir su camino a Estados Unidos. Bajo esa base, las residencias serían para los primeros y las visas humanitarias para aquellos que continuarán hacia el norte, que son la mayoría.
“No sé si termina la caravana en la Ciudad de México, quizás comienza. Pero sí hay la voluntad para que se disuelva aquí (en la capital), pero depende del Estado mexicano”, apuntó Mujica.
La caravana salió el pasado 23 de octubre de Tapachula, Chiapas, y tras 50 días de recorrido llegó a la Ciudad de México el domingo pasado. Tras una confrontación con policías de la capital que impedían su paso sobre la autopista México-Puebla, acudieron a la Basílica de Guadalupe y posteriormente se trasladaron a la Casa del Peregrino San Juan Diego de la delegación Gustavo A. Madero, donde se han refugiado desde la noche del domingo.
Mujica pidió a las autoridades federales, en particular al INM, claridad en sus ofrecimientos. Y es que anoche, esa dependencia ofreció visas humanitarias a las personas de la caravana que sean parte de “grupos vulnerables”, sin explicar a qué se refiere con ese término.
“Necesitamos hablar de las visas humanitarias que ofrece el INM. No sabemos si tienen valor jurídico, muchas se están rompiendo, necesitamos más claridad, que las autoridades las validen y que se puedan renovar (porque son por un año). Mucha gente a las que han dado ese tipo de visas ahora está en en limbo, hay muchas anomalías. Deseamos dialogar”, apuntó Mujica.
Daniel Velasco, director de Asuntos Internacionales de la CNDH, indicó que el organismo acompañará a los integrantes de la caravana en las reuniones con funcionarios federales. Agregó que la Comisión ya gestiona los posibles encuentros a fin de dar solución a las demandas de la caravana.
“Estamos coordinando estas reuniones para tener fecha lo antes posible. Si fuera por nosotros, éstas serían mañana mismo. En eso estamos”.