Ciudad de México. Luego de la larga emergencia sanitaria ocasionada por el Covid-19, los comerciantes de los más de dos mil tianguis de la Ciudad de México están tratando de recuperar su estabilidad económica, y para ello han tenido que recurrir a la solidaridad entre ellos, por ejemplo, mediante el trueque de sus mercancías, como verduras por pizzas, o carne por alimentos preparados, o productos manufacturados, entre otros.
Señala lo anterior Arturo Granados, dirigente de los tianguistas, quien comenta que las más de 300 mil familias que trabajan en esos mercados de origen prehispánico, también tuvieron que recurrir a innovaciones durante la epidemia, como la práctica de entregar sus productos a domicilio.
Durante la pandemia, los comerciantes de los tianguis sufrieron una gran precariedad económica, pues en los meses de mayo y junio de 2020 en que algunas alcaldías restringieron la actividad comercial al cien por ciento, por ejemplo, en Iztacalco e Iztapalapa, explica el dirigente.
“Los ahorros, el capital de los tianguistas se deterioró, se vino abajo, y ahora tratan de recuperar su estabilidad económica...”.
Otros tianguis siguieron trabajando, pero “…bajaron las ventas y mucha gente fue confinada estuvo casi seis meses sin trabajar sin ningún apoyo y algunos se endeudaron con sus amigos”.
Algunos tuvieron que tomar otras medidas drásticas, y se vieron “en la penosa necesidad de interrumpir los estudios de sus hijos…”
Hubo tianguistas que apoyaron a los hijos de otros comerciantes, solventando los gastos necesarios para poder acceder a Internet y así continuar sus estudios, pero varios jovencitos de bachillerato, no pudieron seguir con las clases virtuales.
Muchos comerciantes de los tianguis viven en la CDMX y la zona conurbada como Tlanepantla, Naucalpan, y algunos vienen de Puebla, Tlaxcala y Toluca, otros vienen de Texcoco y otros pueblos del estado de México e Hidalgo.
Afirma Granados que los tianguis distribuyen entre el 70 y el 80 por ciento de los productos de la Central de Abastos, a precios 30 o 40 por ciento más bajos que en los centros comerciales.
Sin embargo, el gobierno nos ha apoyado muy poco para que podamos recuperarnos, “no nos ayudaran ni con el uno por ciento para resolver las necesidades que tenemos”.
“En algunas alcaldías, cerca de 500 tianguistas solicitaron apoyos económicos a las autoridades y sólo unos 30 los recibieron: ofrecían primero 10 mil pesos, luego 20 mil, y luego 25 mil…”
Para lograr la recuperación de estos mercados, Granados exhorta a las autoridades a “que nos dejen trabajar, que no haya tantas restricciones, porque nosotros tenemos temor de que vayan a subir los índices de contagios e inmediatamente a los primeros que van a suspender son a los tianguis y entonces vamos a quedar de nuevo en una situación muy precaria”.