Topeka, Kansas, EU. Bob Dole, quien superó heridas sufridas en combate y se convirtió en un mordaz líder del Senado, en candidato a la presidencia por el Partido Republicano y luego un símbolo de la generación de veteranos de la Segunda Guerra Mundial, falleció, informaron allegados el domingo. Tenía 98 años de edad.
Su esposa, Elizabeth Dole, publicó la noticia el domingo en Twitter.
Dole anunció en febrero de 2021 que había sido diagnosticado con cáncer de pulmón en fase 4. Durante sus 36 años de carrera en el Capitolio, Dole se convirtió en uno de los legisladores y líderes de partido más influyentes del Senado, combinando un talento para llegar a acuerdos con un ingenio cáustico, que a menudo utilizaba contra sí mismo pero que no dudaba en utilizar también contra otros.
Dio forma a la política fiscal, a la política exterior, a los programas agrícolas y de nutrición y a los derechos de los discapacitados, consagrando las protecciones contra la discriminación en el empleo, la educación y los servicios públicos en la Ley para Estadunidenses con Discapacidades.
Las oficinas gubernamentales y los parques nacionales accesibles, las rampas en las aceras y los intérpretes de lengua de signos en los actos oficiales locales son sólo algunos de los legados, no sólo de él sino también de los legisladores que apoyaron esa amplia legislación de derechos civiles hace 30 años.
Dole dedicó sus últimos años a la causa de los veteranos heridos, a la memoria de quienes perecieron y a honrar a la generación de veteranos de la Segunda Guerra Mundial.
Miles de antiguos soldados se congregaron en el National Mall en 2004 para lo que Dole, al hablar en la inauguración del Monumento a la Segunda Guerra Mundial, llamó “nuestra última reunión”. Él había sido uno de los impulsores de su creación.