La Cámara de Diputados realizó una sesión solemne con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, en donde salieron a relucir las diferencias ideológicas entre los partidos.
Morena destacó que el feminismo no es de derecha, mientras el PAN reivindicó el derecho a la vida, es decir su oposición al aborto, lo cual aseguró que no implica criminalizar a las mujeres.
Durante la reunión, estuvo presente la activista Olimpia Coral Melo, promotora de la ley que lleva su nombre en contra de la violencia digital contra las mujeres, quien reconoció el apoyo que le han dado los partidos políticos, pero “son como mi ex, a veces no les creo nada”.
Desde la tribuna del Palacio Legislativo de San Lázaro, destacó que las fuerzas políticas son estructuras patriarcales que se ensañan con las mujeres que han creído en ellos. “Si contáramos las historias de violencia que tuvieron que vivir, callar, soportar cada una de las mujeres que están aquí sentadas en este palacio como nuestras diputadas, no alcanzaría el periodo de sesiones para contar sus historias”.
Tras dos horas de discursos en contra de la violencia contra las mujeres, el diputado Carlos Ortiz Tejeda (Morena) dijo que este es el momento de que contesten los hombres con solidaridad y compromiso. La paridad es cosa de dos.
Resaltó no querer llegar a su casa y decir a sus familiares mujeres que sólo estuvo en la cámara como oyente. “Va mi compromiso de qué comenzando con mi hogar, la paridad será una realidad”, prometió el también presidente de la Comisión de Cultura lo que arrancó el aplauso de los legisladores.
Previamente Jessica Ortega, de Movimiento Ciudadano, reclamó que haya recursos económicos para la lucha en contra de la violencia de género, pues sin ellos, los pronunciamientos sobre el tema se quedan en mero discurso.
La pevemista Nayeli Fernández expuso que también es responsabilidad de los hombres que se acabe con este tipo de agresión. Sostuvo además que la legislación en México es de las más avanzadas, pero el acceso a la justicia es el reto.
La priísta Carolina Viggiano expuso que los recortes presupuestales también son violencia. El acceso a una vida libre de agresiones requiere asignaciones presupuestales. Por ejemplo, para refugios y estancias infantiles.
Joanna FelipeTorres (PAN) recordó que en su partido creen que “el derecho a la vida debe de ser reconocido como el derecho de excelencia, como la condición necesaria para que existan y se respeten todos los demás derechos, porque sin vida no hay nada. Pero eso, jamás implicará que criminalizar ni violentar institucionalmente a las mujeres sea un deseo, porque hacer esto sería atentar contra nuestros propios derechos”.
Por Morena, Erika del Castillo Ibarra dijo que lo alcanzando en materia de paridad de género es una conquista de las mujeres y no un acto de buena voluntad. Esto no hubiera sido posible sin el movimiento feminista y, por supuesto, de izquierda, pues no hay feminismos de derecha.
En la sesión también estuvo la directora del Instituto Nacional de las Mujeres, Nadime Gasman, quien precisó que ese organismo seguirá diseñando y articulando políticas públicas en esta materia, para lograr una sociedad más justa para todos.