Empresarios, hoteleros y cuerpos colegiados de la Riviera Maya, pidieron que el Tren Maya modifique su trazado original en Playa del Carmen para integrarse al Anillo Periférico, lo cual conllevaría importantes ahorros económicos además de evitar el tráfico vehicular que se avecina para el pleno centro del municipio de Solidaridad.
En un documento firmado por los presidentes de la Asociación de Hoteles de la Riviera Maya, Toni Chaves, Ampi, Canaco, y 11 asociaciones empresariales, cuerpos colegiados y regidores, el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Lenin Amaro Betancourt, explicó que de entrada fue una carta abierta, pero en próximos días entregarán en Palacio Nacional, así como Fonatur de la Ciudad de México y de Cancún.
Detalló que los terrenos por los que pasaría el Tren Maya son municipales, por lo que no tendrían que recurrir a figuras de expropiaciones o la compra de terrenos que podrían estar bajo alguna figura jurídica que dificulte la transacción.
Explicó que el anillo periférico es un viejo proyecto urbano de Playa del Carmen, por lo que forma parte del Programa de Desarrollo Urbano del Municipio, incluso, en algún momento se licitó la obra pero ante la falta de recursos no avanzó.
La propuesta, dijeron, tiene el menor impacto negativo en lo económico y social durante la construcción y operación del Tren Maya; genera importantes ahorros de fondos federales, 5 mil millones de pesos, durante su planeación y construcción; y generará beneficios económicos y sociales para las zonas marginadas de la ciudad.
Argumentaron que la construcción del Anillo Periférico para el paso del Tren Maya implicaría la reducción de costos y tiempos asociados a la construcción al evitar los trabajos de modificación de líneas aéreas existentes de la CFE, a líneas subterráneas.
La propuesta también reduciría los tiempos de construcción al edificarse en terrenos con accesibilidad directa y exclusiva para las obras; se evitarían conflictos sociales y legales con los gastos asociados e inherentes para la reubicación de comunidades y familias que se asentaron en las vías de alta tensión de la CFE, citaron entre otros tantos argumentos de tipo urbanístico, social, ambiental y de movilidad.
Lenin Amaro aclaró que todos los conflictos citados que provocará la construcción del Tren Maya son independientes a los del gran tráfico vehícular que hoteleros han advertido que generará en la carretera federal Tulum-Cancún.