Luxemburgo. Google perdió este miércoles una apelación contra una decisión antimonopolio que lo multa con 2 mil 420 millones de euros (2 mil 800 millones de dólares), en una victoria para la Unión Europea en la primera de tres sentencias fundamentales para la regulación de las tecnologías en el bloque.
La comisaria de Competencia, Margrethe Vestager, multó en 2017 al motor de búsqueda de Internet más popular del mundo, una unidad de la compañía Alphabet, por el uso de su propio servicio de comparación de precios para obtener una ventaja desleal sobre rivales europeos más pequeños.
El caso de las compras fue la primera de tres decisiones que hicieron que Google acumulara 8 mil 250 millones de euros en multas antimonopolio de la UE en la última década.
La empresa podría perder también los recursos contra las otras dos sentencias, relativas a su sistema operativo para móviles Android y al servicio de publicidad AdSense, en los que la UE tiene argumentos más sólidos, según especialistas en defensa de la competencia.
El apoyo del tribunal a la Comisión en su última sentencia también podría reforzar la mano de Vestager en sus investigaciones sobre Amazon, Apple y Facebook.
"El Tribunal General desestima en gran medida el recurso de Google contra la decisión de la Comisión por la que se declaró que Google abusó de su posición dominante al favorecer su propio servicio de comparación de compras, en detrimento de los servicios de comparación de compras de la competencia”, dijo la corte.
El tribunal indicó que la Comisión consideró de forma correcta que las prácticas de Google perjudicaban a la competencia y desestimó el argumento de la empresa de que la presencia de plataformas comerciales demostraba que había una fuerte competencia.
La sentencia respaldó la multa impuesta por la Comisión, alegando la gravedad de la infracción y que "la conducta en cuestión se adoptó de forma intencionada, no por negligencia".
Google señaló que revisará la sentencia y que ya ha cumplido la orden de la Comisión para garantizar la igualdad de condiciones para los rivales. No dijo si recurriría al Tribunal de Justicia de la UE (TJUE), la máxima instancia judicial europea.
La Comisión se congratuló de la sentencia, afirmando que aporta claridad jurídica al mercado.
"La Comisión seguirá usando todas las herramientas a su disposición digital para abordar el papel de las grandes plataformas digitales de las que dependen empresas y usuarios para, respectivamente, acceder a usuarios finales y servicios", afirmó el ejecutivo de la UE en un comunicado.