Ciudad de México. El Porsche 911 Turbo S 'One of a Kind' Pedro Rodríguez –auténticamente único en el mundo, como su nombre lo indica–, fue protagonista en la casa de subastas López Morton en la colonia Lomas - Virreyes de la alcaldía Miguel Hidalgo en la Ciudad de México, al ser producto de una emocionante subasta que llevó a los potenciales compradores a impulsar la puja hasta llegar al impresionante monto de 11 millones 800 mil pesos mexicanos.

La identidad del mejor postor no fue revelada, pero es evidente que ha hecho una de las compras más inteligentes en términos de inversión, sin dejar de lado que se trata de una auténtica pieza de colección que, lejos de devaluarse al tratarse de un automóvil superdeportivo del segmento premium; llevará su plusvalía siempre a la alza, toda vez que, como su nombre lo indica, es ciertamente una pieza irrepetible de manera oficial por la firma teutona.

El monto total recaudado, producto de la venta en forma de subasta de este impresionante espécimen automotriz, está destinado a obras altruistas a través de donativos a diversas causas e instituciones de beneficencia en el país, como lo dijo Camilo San Martín, director general de Porsche de México; “Queremos que el inquebrantable legado de Pedro Rodríguez en el mundo del automovilismo y en particular en la historia de Porsche, vaya mucho más allá de las pistas. Por eso el dinero recaudado en la subasta de este auto servirá para alegrar la vida de muchas familias que lo necesitan”.

Un elemento que aporta al hecho de ser auténticamente único para este 911 Turbo S, no solamente es el factor de haber sido bloqueado a nivel internacional mediante el sistema Porsche Car Configurator, en términos de detalles y distintivos de diseño que serán irrepetibles de manera oficial.

Pero para todo aquel que por el “antojo” de tener uno igual, pretenda darse a la tarea de crear una imitación del mismo, existe un elemento que los dejará absolutamente fuera de toda posibilidad de acercarse al menos un poco a una buena imitación; este ingrediente es ni más ni menos que, la participación de cinco entidades que unieron esfuerzos, creatividad y buena voluntad para llegar a capitalizar este sueño en un auto verdaderamente irrepetible.

Los involucrados en este hito para la marca fueron, la familia de Pedro Rodríguez, Porsche de México, Porsche Latin America, Porsche Exclusive Manufaktur y el Museo Porsche, alineación que francamente resulta difícil que se repita en un hecho similar.

Este bello ejemplar está basado en el 911 Turbo S de 641 hp de potencia (478 kW) y 590 lb-pie de par motor, el cual acelera de 0 a 100 km/h en tan sólo 2.7 segundos y alcanza una velocidad máxima de 330 kilómetros por hora.

El diseño exterior evoca inmediatamente al 917 KH, gracias a su carrocería pintada en azul Gulf con una franja anaranjada que lo atraviesa, mismos colores que llevó el auto de carreras con el que Pedro ayudó a Porsche a ganar los Mundiales de Marcas de 1970 y 1971. Las puertas y el cofre tienen el característico número 2 en color negro sobre un círculo blanco, tal como el 917 KH con el que el mexicano ganó las 24 Horas de Daytona en 1970 y 1971 y los 1000 Km de Monza de 1971. Inclusive los nombres de las ocho carreras que ganó Pedro Rodríguez con el 917 KH están grabados debajo del alerón trasero.

Por si estos detalles fueran poco, además la llave porta la firma de Pedro Rodríguez, y está pintada en el mismo azul Gulf del auto. Finalmente, un accesorio adicional que da ese toque premium de exclusividad, es un set de maletas que se ajusta a la perfección a su baúl de carga.

Sin duda, el nuevo y único propietario del Porsche 911 Turbo S 'One of a Kind' Pedro Rodríguez tiene prácticamente una pieza de museo que, pese al precio pagado, la relación costo beneficio siempre estará inclinada de su lado.