Londres. El primer ministro británico, Boris Johnson, rechazó el lunes los llamados a comparecer ante los diputados por las cada vez más numerosas acusaciones de favoritismo contra su gobierno conservador.
Este lunes por la tarde se organizó en la Cámara de los Comunes un debate urgente sobre las reglas de conducta que enmarcan el trabajo de los parlamentarios, tras las acusaciones que circulan desde hace días contra el gobierno.
Pero Johnson no participó en el encuentro y justificó su ausencia con una visita a un hospital prevista "desde hacía tiempo" en el nordeste de Inglaterra.
"Si hay algo positivo que se pueda sacar de todo esto, es que (...) el presidente (de la Cámara) está determinado a dirigirnos hacia un sistema que nos permita tener una visión multipartidista", declaró Johnson al margen de esta visita.
Ante el parlamento, el jefe de la oposición laborista, Keir Starmer, acusó a Johnson de perjudicar "la democracia" y de haber "dado luz verde a la corrupción".
"Hoy ni siquiera tiene la decencia de venir a defender lo que hizo, o pedir disculpas", dijo.
La semana pasada, Boris Johnson causó indignación al dar su apoyo a una reforma de las reglas parlamentarias para evitar sanciones a un diputado conservador, en el centro de las críticas por sus actividades de "lobbying".
El objetivo de la iniciativa era permitir a cualquier diputado acusado defenderse y apelar, y evitaba al mismo tiempo que un miembro del Partido Conservador, Owen Paterson, fuera suspendido del Parlamento.
Pero la medida desató un escándalo político y el primer ministro tuvo que dar marcha atrás.
Su gobierno ya se había visto salpicado por otro escándalo reciente que sacó a la luz las relaciones peligrosas entre el poder y los negocios.
"El país todavía no ha oído una palabra de arrepentimiento sobre sus intentos (de Johnson) de crear una norma para él y sus amigos y otra para el resto. Tiene que venir ante la Cámara (de los Comunes) y pedir perdón", dijo en la BBC la diputada liberal-demócrata Wendy Chamberlain, una expolicía que propuso el debate.