San Cristóbal de Las Casas, Chis., El Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas (Frayba) manifestó su “preocupación por la imparable violencia armada y el constante desamparo que 10 comunidades del municipio de Aldama, viven diariamente en un entorno torturante”, a causa de “agresiones armadas” de habitantes de la vecina localidad de Santa Martha, Chenalhó.
En una “acción urgente” dijo que “según información proporcionada por los representantes de los desplazados de Aldama, desde las 5.04 horas del 1 de noviembre empezaron los ataques armados”.
Agregó que hasta este jueves temprano se habían registrado “47 ataques con armas de alto calibre, que han generado el desplazamiento forzado de aproximadamente tres mil personas, poniéndolas en un alto riesgo a la vida, integridad y seguridad personal de las mujeres, niñas, niños, personas de la tercera edad de las comunidades de Aldama”.
Señaló que “las agresiones son realizadas por un grupo de personas armadas que operan desde Santa Martha, Chenalhó. No han cesado y los habitantes se encuentran sitiados”.
Expresó que “las tres mil personas desplazadas pertenecen a las comunidades de Chayomte, Juxton, Stzelejpotobtik, Chivit, Yeton, San Pedro Cotzilnam, Tabac, Cocó y una parte de Xuxchen que han abandonado sus casas, huyendo a las montañas para refugiarse”.
El organismo que preside el obispo emérito de Saltillo, Coahuila, Raúl Vera López, manifestó su preocupación “por la escalada de violencia hacia las comunidades de Aldama, ya que desde hace 5 años han sido permanentes las violaciones a los derechos humanos en este territorio de los Altos de Chiapas, bajo la tolerancia y complicidad del gobierno mexicano".
Exigió, “de manera enérgica, alto a la violencia, basta de simulación de los gobiernos federal y estatal para atender este horror que vive diariamente el pueblo maya tsotsil de Aldama y Santa Martha”.
La confrontación entre Aldama y Santa Martha, que ha dejado alrededor de 25 muertos de ambos bandos, comenzó hace más de 40 años por la disputa de 60 hectáreas, que el primero alega son de su propiedad.