La Secretaría de Marina (Semar) ha recuperado en lo que va del año más de 38 y medio kilómetros de redes fantasmas en el Alto Golfo de California, en la zona protegida para la protección de la vaquita marina y la totoaba, ambas especies es peligro de extinción.
Las redes fantasmas son aparejos de pesca abandonados, perdidos o descartados, que son localizados y asegurados por las autoridades marítimas dentro de esta zona, donde la pesca está prohibida.
Según un reporte de la Semar, hasta el tercer trimestre de este año el personal que vigila la veda en dicha área había recuperado 151 redes fantasma, que suman una extensión de 38 mil 592 kilómetros.
La Armada expuso que realiza este tipo de actividades en cumplimiento del artículo 30 de la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal y en coordinación con la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas y la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca, entre otras autoridades federales, estatales y municipales.
El documento contiene cifras desde el 2016, y revelan que fue durante el 2018 cuando se localizaron más redes fantasma, un total de 674, con una extensión de 118 mil 191 metros.
Este número se redujo a menos de la mitad al año siguiente, con 253 redes fantasma incautadas, y una extensión de 45 mil 622 metros en total.