Ciudad de México. En una sesión donde priístas cuestionaron que Quirino Ordaz Coppel, “está más preocupado por buscar una chamba”, el Consejo Político Nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), rechazó otorgarle permiso al ex gobernador de Sinaloa para aceptar el cargo de embajador de México en España y mantener su militancia.
Como parte de las consideraciones, se expresó que el nombramiento busca dividir a la alianza Va por México e incluso al propio partido.
Si, a pesar de la decisión asumida este domingo por el órgano partidario, Ordaz Coppel acepta la invitación que le hizo el 10 de septiembre el presidente Andrés Manuel López Obrador, se le iniciará un proceso de expulsión desde la Comisión Nacional de Justicia Partidaria.
Ordaz Coppel concluyó hoy su gestión. Rubén Rocha Moya, de Morena, tomó posesión del cargo de gobernador de Sinaloa
Esta misma tarde, el CPN eligió a Samuel Palma César como presidente de la comisión, en lugar de Fernando Elías Calles, quien falleció el 9 de octubre.
Al pronunciarse en contra de la solicitud, el diputado federal Augusto Gómez Villanueva señaló que la invitación busca “socavar la vida interna del partido e intenta sabotear la alianza que se ha logrado integrar con los partidos Acción Nacional y de la Revolución Democrática”.
También, la consejera Maritza Jiménez Pérez cuestionó que la dirigencia del PRI en Sinaloa no se sumó al recurso de impugnación que se presentó en torno de los resultados de la elección del 6 de junio en la entidad.
“Estos actos dañan y lastiman a nuestra militancia. El priismo sinaloense debe sentirse ofendido, porque (Ordaz Coppel) está más preocupado por buscar una chamba, en vez de ver por los militantes. Usan siglas y la fortaleza de nuestros militantes cuando así les conviene”, manifestó.
También, el diputado Hiram Hernández Zetina agregó que la solicitud del gobernador es para trabajar con el gobierno de Morena, antagónico al PRI. “Todos sabemos los resultados de la elección del 6 de junio, donde fue noticia y vergüenza nacional que hubo terror, miedo, violencia, levantones. Se levantó a los funcionarios de partido para que no pudieran organizar y movilizar a los priistas a votar”, explicó.
Paloma Sánchez, vocera del partido y única diputada federal por Sinaloa, también votó en contra de la petición.