Palermo, Italia. El juicio contra el dirigente italiano de extrema derecha Matteo Salvini, acusado de haber bloqueado ilegalmente en el mar a 147 migrantes en 2019 cuando era ministro del Interior, empezó este sábado en Palermo, Sicilia.
El día de apertura de la audiencia en Palermo, el juez Roberto Murgia señaló que todos los testigos presentados por las partes podían testificar, incluido el actor estadounidense Richard Gere, quien realizó una visita humanitaria al barco, y el ex primer ministro italiano Giuseppe Conte.
El líder de la ultraderechista Liga, contrario a la migración y que forma parte de la coalición en el poder que lidera Mario Draghi, está acusado de secuestro y abuso de poder por haber prohibido el desembarco de 147 migrantes rescatados en el mar Mediterráneo por la oenegé Open Arms en agosto de 2019.
La audiencia, que se abrió el 15 de septiembre pero fue aplazada inmediatamente, fue un mero trámite procesal que duró menos de tres horas, antes de que el juez anunciara que la próxima visita será el 17 de diciembre.
En el caso de que fuera declarado culpable, Salvini afronta un máximo de 15 años de prisión.
"Dime qué serio es un juicio en el que Richard Gere vendrá de Hollywood para testificar sobre mi maldad", afirmó Salvini a los periodistas fuera de la sala del tribunal.
"Espero que dure el menor tiempo posible porque hay cosas más importantes de las que ocuparse", prosiguió el político italiano.
Salvini, de 48 años, sostiene que actuó por el bien de Italia con su política de "puertas cerradas" para disuadir a los migrantes de embarcarse en las costas africanas para una travesía peligrosa del Mediterráneo.
También asegura que la decisión tomada no fue solamente suya sino que la acordó con el Gobierno, incluido Conte, primer ministro por entonces.
Además, testificaron la actual ministra de Interior, Luciana Lamorgese, y el ministro de Exteriores, Luigi di Maio.
La parte civil de Open Arms, oenegé española que opera el barco de rescate, solicitó como testigo a Gere, quien subió a bordo en solidaridad con los inmigrantes antes de que atracara en la isla siciliana de Lampedusa.
"El proceso que quería la izquierda y los partidarios de la inmigración ilegal comienza: ¿cuánto costará a los ciudadanos italianos?", añadió Salvini.
"Aquí está el tribunal de la cárcel de Palermo", tuiteó Salvini desde la sala de audiencia, junto a una imagen suya con una mascarilla negra.
Antes de la audiencia, el fundador y director de Open Arms, Oscar Camps, manifestó que el juicio no tiene motivaciones políticas.
"Salvar a personas no es un crimen, sino una obligación no sólo de los capitanes sino de todo el Estado", aseguró Camps a los periodistas.
El inicio del proceso coincidió con la llegada de 406 migrantes, rescatados en varias operaciones frente a las costas de Libia por la ONG Sea Watch, al puerto siciliano de Pozzallo.
Durante seis días, se negó a otorgar el permiso de atracar en un puerto seguro al barco de la organización española, que ancló frente a la pequeña isla italiana de Lampedusa, al sur de Sicilia, mientras empeoraban las condiciones de las personas a bordo.
Los migrantes pudieron desembarcar gracias a una orden emitida por la justicia siciliana al término de una inspección a bordo que confirmó la emergencia sanitaria y el hacinamiento dentro del barco.
El Senado de Italia votó el pasado año el levantamiento de la inmunidad parlamentaria a Salvini, lo que allanó el camino para que fuese juzgado.
Un caso similar en el que Salvini fue acusado de bloquear a otros migrantes en el mar en un barco de la guardia costera italiana fue desestimado por un tribunal de Catania a principios de este año.
La Liga está contra la llegada de migrantes, argumentando que Italia soporta una carga injusta al ser el primer punto de entrada a Europa para lo que provienen del norte de África.