Chilpancingo, Gro. El Consejo Indígena y Popular de Guerrero-Emiliano Zapata (Cipog-EZ), confirmó que un grupo de observadores de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), visitó las comunidades indígenas ubicadas en los municipios de Chilapa de Alvarez, y José Joaquín de Herrera, en la Montaña Baja de Guerrero.
Mediante un comunicado de prensa, mencionaron que la delegación de la CNDH, visitó su territorio del 18 al 20 de octubre del año en curso “luego de reiterados intentos con todos los niveles de gobierno; de tantos asesinatos, torturas, desapariciones, secuestros, extorsiones, emboscadas, fabricación de delitos con sus respectivas ordenes de aprehensión; luego de promesas incumplidas del gobierno federal, estatal y municipal; luego de movilizaciones; luego de la solidaridad de colectivos y organizaciones, así como de un mitin afuera de la CNDH. En medio de tanta violencia y tanta muerte, luego de tanta resistencia y organización”.
Manifestaron que esperan que documenten “el dolor que recorre y marca la vida de niños, niñas, hombres y mujeres, abuelos y abuelas; esperamos que digan la verdad; esperamos que el gobierno mexicano escuche a esta Comisión, porque a nosotros no nos ha escuchado, al contrario, nos ha menospreciado, censurado, difamado, criticado, olvidado”.
Esperamos que el nuevo gobierno de Guerrero encabezado por Evelyn Salgado Pineda “mire la situación que se vive en la Montaña Baja de Guerrero; que reconozca la existencia de los grupos criminales conocidos como “Los Ardillos” y ¨Los Rojos”, su vinculación con el mal gobierno; su cercanía con el PRD, y personajes como Celso Ortega y que los desarticule, desde la cabeza, que se encuentra dentro del PRD, en la Fiscalía del estado, en la policía municipal, hasta los pies”.
Mencionaron que “en zonas enteras se siembra la amapola y se da libremente el tránsito de la droga, las extorsiones y los desplazamientos que tienen como fin último la expropiación de nuestro territorio para la explotación minera, que son el motivo de tanta violencia en el estado por el control territorial”.
En resumen “esperamos que hagan el trabajo que sus antecesores, empezando por Héctor Astudillo, decidieron no hacer. Es común que los gobiernos entrantes culpen a los gobiernos salientes de la crisis que existe en el estado de Guerrero, nosotros y nosotras, no olvidamos y hoy se lo recordamos”.
Esperamos “justicia y nuestros brazos siempre estarán arriba exigiendo justicia; esperamos que los niños y niñas de nuestras comunidades puedan vivir sin el miedo de ir a la escuela por las incursiones de “Los Ardillos”; que nuestra gente pueda vivir libre sin el riesgo de ser asesinados, secuestrados, torturados por estos grupos de la delincuencia organizada que nos cercan y acechan”.
Sabemos (el presidente) Andrés Manuel López Obrador volverá a estar en Guerrero “sin haber hecho nada por nosotros y nosotras le reiteramos que no luchamos por cargos públicos, no somos financiados por ningún partido; nosotros luchamos por la vida, porque grupos del crimen organizado operan con la complicidad del mal gobierno; le decimos que nuestros dolores y demandas no están para sus juegos”.
Le preguntamos al presidente: “¿de qué nos sirve un programa social si a la vuelta están los criminales acechando para extorsionarnos o asesinarnos. Para nosotros ahora lo más importante es la seguridad para nuestras comunidades”.