Ciudad de México. Ciberdelincuentes operan al menos 80 aplicaciones para abusar de la necesidad económica de los usuarios a quienes ofrecen préstamos inmediatos, que posteriormente son cobrados por supuestos gestores que recurren a métodos violentos por medio de acoso, amenaza y extorsión, alertó la Policía Cibernética de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México.
Las apps detectadas por los uniformados no se encuentran reguladas por la Comisión Nacional para la Protección y la Defensa de los Usuarios (Condusef), por lo que la SSC llamó a la población a no confiar en la obtención de préstamos accesibles sin la entrega de requisitos y sin revisión de buró de crédito, además de extremar cuidados antes de compartir identificaciones, documentos oficiales y acceso a agendas de dispositivos o cuentas de correo electrónico a fin de evitar el robo de identidad.
Con la llegada del semáforo epidemiológico color verde, la dependencia detectó que “las denuncias sobre este tema han crecido”; sin embargo, no proporcionó el número de los casos.
Señaló que a través del patrullaje virtual los elementos de la Policía Cibernética identificaron otras situaciones inusuales, es decir que para instalar las aplicaciones los usuarios dan acceso a su agenda de contactos y galería de imágenes, que utilizan si la persona no paga en tiempo.
Además los usuarios reciben amenazas vía telefónica o mediante mensajes de WhatsApp, mientras que en alguno casos las fotos de las víctimas son colocadas en redes sociales “ofreciendo supuestos servicios sexuales o refieren que el afectado es un defraudador”.
Los uniformados identificaron que algunos de los usuarios fueron víctimas con solo descargar la aplicación a pesar que nunca solicitaron e préstamo o que nunca les realizaron la transferencia del dinero, pero si otorgaron a los delincuente el permiso para acceder a información personal.
La SSC señaló que inició gestiones con las autoridades correspondientes para dar de baja las aplicaciones con la información de las Apps y el reporte del denunciante.