Quito. El presidente ecuatoriano, Guillermo Lasso, decretó la noche de este lunes el estado de excepción en todo el país, como una medida para enfrentar el incremento de la delincuencia en varias ciudades del país andino.
La medida se conoció luego que cientos de agricultores bloquearon carreteras con neumáticos en llamas, piedras y troncos en provincias del norte y centro de Ecuador en protesta contra el alza de la gasolina y en demanda de precios mínimos para sus productos.
Las manifestaciones fueron convocadas por el Frente Nacional Agropecuario para la Soberanía Alimentaria, al que se sumaron gremios de sindicalistas, profesores y sectores sociales urbanos, cada uno con sus propias demandas pero en coincidencia respecto de los combustibles.
Lasso anunció: "De inmediato nuestras Fuerzas Armadas y Policiales se sentirán con fuerza en las calles porque estamos decretando el estado de excepción en todo el territorio nacional, con especial énfasis en aquellas provincias donde los indicadores de violencia lo justifican".
Decretamos Estado de Excepción en todo el territorio nacional para llevar a cabo controles de armas, inspecciones, patrullaje las 24 horas del día, requisiciones de drogas, entre otras acciones; y crearemos la Unidad de Defensa Legal de la Fuerza Pública. pic.twitter.com/3eSNrKSQPJ
— Guillermo Lasso (@LassoGuillermo) October 19, 2021
Añadió que durante el estado de excepción se realizarán controles de armas, inspecciones, patrullajes las 24 horas del día y requisas de droga, entre otras acciones. "Daremos a las fuerzas del orden el respaldo necesario para llevar a cabo su lucha contra el crimen", dijo el presidente.
El gobierno también indultará a policías y militares que hayan sido injustamente condenados por cumplir con su labor.
El domingo, en la ciudad costera de Guayaquil (oeste), un niño de 11 años murió durante un asalto en un restaurante de un centro comercial.
Los delincuentes amenazaban con pistolas a los comensales para obligarles a entregar sus pertenencias.
Según comentaron testigos a medios locales, el niño murió por el impacto de una bala perdida, tras producirse un enfrentamiento entre los asaltantes y un policía que se encontraba en el local.
El mandatario dijo que si bien nadie podrá reparar la pérdida de esa vida, hay que implementar acciones para terminar con la violencia que arrebató la vida a ese niño y a muchos ecuatorianos.
Lasso afirmó que Ecuador dejó de ser un país de tránsito de drogas para ser también un país de consumo, lo que se refleja en la cantidad de crímenes, que tienen relación directa o indirecta, con ese delito, así como con actos de sicariato y diversas formas de violencia.
"Más del 70 por ciento de las muertes violentas que hoy ocurren en Guayas están relacionadas con el tráfico de drogas", aseguró el mandatario.
La violencia que viven varias ciudades ecuatorianas también se siente en las cárceles ecuatorianas, entre las que enfrentamientos de diversas bandas delincuenciales dejan en lo que va del año más de 230 muertes y decenas de heridos.