Laboratorios de Biológicos y Reactivos de México, S.A. de C.V. (Birmex) comenzó la inoculación de caballos con el antígeno elaborado en el Instituto de Biotecnología (IBT) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), para la elaboración de suero para tratamiento anti-SARS-CoV-2.
La expectativa es que en enero de 2022, tras finalizar las diversas pruebas se pudiera comenzar a distribuir en hospitales para el tratamiento de los primeros pacientes COVID-19 (pruebas preclínicas).
La empresa gubernamental cuenta con amplia experiencia en la producción de sueros hiperinmunes de origen equino que se utilizan en el tratamiento de diversas afecciones que comprometen la salud de los mexicanos, como envenenamientos por mordedura de serpientes o picadura de alacranes. La eficiencia de estos productos radica en la presencia de anticuerpos neutralizantes que fueron producidos por caballos inmunizados con pequeñas cantidades de los venenos respectivos.
“Esta experiencia permite anunciar hoy el inicio de los trabajos dirigidos a la producción de un nuevo suero hiperinmune contra el SARS CoV-2 que podrá aplicarse a pacientes que presentan COVID-19 en grado moderado o severo con el propósito de bloquear la capacidad de virus en las células humanas, lo cual contribuye a romper el ciclo de infección y las posibles complicaciones de la enfermedad”.
Birmex detalló que el agente inmunizante empleado en este proyecto es una fracción de la cubierta del virus SARS CoV-2, el cual fue elaborado por el Instituto de Biotecnología de la UNAM.
El suero aplicado siguiendo un esquema de inmunización a un grupo de caballos donados por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) a Birmex, luego de que la Secretaría de Salud hiciera la petición formal para la producción del plasma, con la intención de “inducir una vigorosa respuesta inmune”.
Explicó que los anticuerpos se cosechan del plasma sanguíneo del equino para continuar con los procesos de purificación, concentración, envase y liofilización. El suero que se obtiene será distribuido a hospitales para su aplicación a personas afectadas por COVID-19.
Durante las diferentes etapas del proceso se realizarán pruebas de control de calidad dirigidas a garantizar la inocuidad y cumplir la regulación sanitaria vigente para ofrecer a las personas un biológico confiable, seguro y eficaz.
Se espera que en diciembre se disponga del primer lote, que se utilizará para realizar pruebas preclínicas; con los siguientes lotes “en 2022 se pretende realizar las primeras pruebas en humanos”.
Este proceso no pone en riesgo la salud de los equinos donantes, ya que el Comité Institucional para el Cuidado de los Animales de Laboratorio (Cicual) de Birmex vigila la observancia de los principios de respeto y bienestar de estos animales, siempre recibiendo trato y cuidados conforme a lo establecido en la Ley de Protección a los Animales.
Los caballos son de la raza autóctona Santa Gertrudis, registrada ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que se desarrolló tras varias generaciones de cruzas entre equinos, siendo esta última el tipo de animal con sangre pura que reúne las especificaciones adecuadas para la producción del plasma.
Birmex recibe apoyo del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACyT), la UNAM, el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) y la Sedena, en este esfuerzo para aportar una opción para controlar la pandemia causante de COVID-19.
Los 60 caballos proporcionados por la Sedena se encuentran en la Unidad de Producción de Plasma Hiperinmune, ubicado en la carretera libre México-Pachuca, en el municipio de Tecámac, Estado de México.
El director general de Birmex, Pedro Zenteno Santaella, recibió los equinos en febrero pasado (15 machos y 45 hembras), los que se sumaron a los 80 ejemplares que ya estaban en las instalaciones del laboratorio.
La experiencia con este tratamiento en otros países ha mostrado una disminución de 40 por ciento en la mortalidad de personas contagiadas con el virus SARS-CoV-2 y el tiempo de recuperación es más corto que en quienes no reciben el suero equino.