Londres. Los mercados del petróleo subían por sexto día seguido este martes, impulsados por una oferta más ajustada y una perspectiva de demanda firme, pero la escasez de energía en China, que afecta a la producción industrial, atenuó el repunte.
A las 10:16 GMT el Brent ganaba 67 centavos o 0.8 por ciento a 80.20 dólares el barril, después de llegar a 80.75 dólares, su nivel más alto desde octubre de 2018, tras el alza de 1.8 por ciento de la víspera.
El West Texas Intermediate (WTI) de Estados Unidos subía 79 centavos o 1 por ciento a 76.24 dólares el barril, tras alcanzar un máximo de sesión de 76.67 dólares, su mayor nivel desde principios de julio. El contrato saltó 2 po ciento el lunes.
Los huracanes Ida y Nicholas, que azotaron el Golfo de México, dañaron plataformas, oleoductos y centros de procesamiento, paralizando la mayor parte de la producción en alta mar durante semanas.
La oferta también se ha visto afectada porque Nigeria y Angola, los principales exportadores africanos de petróleo, tendrán dificultades para aumentar la producción a sus cuotas establecidas por la OPEP hasta al menos 2022 debido a problemas de inversión y mantenimiento, advirtieron fuentes.
Sus problemas reflejan los de varios otros miembros del grupo de productores OPEP+ que han estado frenando la producción para sostener los precios, pero que ahora no logran aumentar el bombeo para satisfacer la demanda en recuperación.
Barclays elevó sus pronósticos de precios 2022 para el Brent y el WTI a 77 dólares y 74 dólares por barril, respectivamente.
Morgan Stanley prevé que el Brent cotice a 77.5 dólares el barril en el tercer trimestre en un escenario base y a 85 dólares en un caso alcista.