Ciudad de México. El rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Enrique Graue Wiechers, designó a María Elena Trujillo Ortega como coordinadora del recién creado Programa Universitario de Alimentación Sostenible (PUAS), que sustituye al Programa Universitario de Alimentos (PUAL), para modernizarlo en sus estrategias e incluir en sus investigaciones el eje transversal de la sustentabilidad en el análisis de los insumos y hábitos con que comemos.
Trujillo Ortega es médico veterinario zootecnista por la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la UNAM, doctora en Ciencias Veterinarias. Es académica de la FMVZ, donde ha sido jefa de departamento, secretaria general y directora; además, desde 2016 hasta fecha reciente fue coordinadora del Consejo Académico del Área de las Ciencias Biológicas, Químicas y de la Salud.
Asimismo, es miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) nivel I y tiene a su cargo la presidencia de la Academia Veterinaria Mexicana.
Al darle posesión del cargo en ceremonia a distancia, ayer el coordinador de la Investigación Científica, William Lee Alardín, señaló que hay dos retos conceptuales de alto nivel en el PUAS: el relacionado con la alimentación y las consecuencias para la salud de las personas en nutrición, información, etiquetado de alimentos y hábitos al comer y el de la sustentabilidad.
“Hemos llegado a un punto como sociedad donde la alimentación no puede ni debe seguir la ruta que ha caminado durante varias décadas en el mundo desarrollado. Hay un exceso de ingesta calórica, de desbalances, pero sobre todo hay una sobrexplotación ambiental de pesquerías y una destrucción ambiental por la demanda de estos productos”, señaló.
Lo anterior, agregó, tiene implicaciones para el uso y agotamiento de los suelos, erosión, producción de gases de efecto invernadero, reducción de la biodiversidad, calentamiento global, acidificación de los mares y la composición atmosférica.
Lee Alardín detalló que en la Tierra hay aproximadamente el doble por kilo en animales domesticados, básicamente cerdos y vacas, que personas, y juntos suman 23 veces más que todos los demás mamíferos salvajes del planeta. En el caso de las aves domésticas, son tres veces más abundantes que las salvajes. “Todo esto cuesta, y hay que cambiar la lógica de la alimentación para contribuir a un desarrollo sostenible y duradero”, subrayó.
En su turno, Trujillo Ortega recordó que existen posgrados en sustentabilidad, y en las carreras de Química, Medicina, Veterinaria y de las áreas sociales y humanas como la Economía y la Antropología se maneja la sostenibilidad como un pilar que considera la alimentación.
Destacó que en alimentación actual de los humanos las aves son la principal proteína animal que sustenta el planeta, después la carne de cerdo y luego la res. Pero esto tiene un peso específico en el medio ambiente, el uso de suelos, el uso o no de antibióticos y el manejo de biodigestores.