Lisboa. El ex presidente portugués Jorge Sampaio, un socialista que ocupó también varios puestos en la ONU, falleció este viernes en Lisboa a los 81 años.
"Jorge Sampaio nos ha dejado hoy (viernes) dejándonos una doble herencia, compuesta de libertad pero también de igualdad", dijo el presidente de la República, el conservador Marcelo Rebelo de Sousa.
"Siempre fue un ejemplo", agregó el primer ministro Antonio Costa, elogiando la "rectitud moral" del ex jefe de Estado.
El gobierno socialista decretó tres días de luto nacional, a partir del sábado, agregó Costa.
Secretario general del Partido Socialista, alcalde de Lisboa y después jefe de Estado entre 1996 y 2006, Sampaio sufría importantes problemas cardíacos y estaba en el hospital desde finales de agosto.
Nacido en Lisboa en 1939, en el seno de una familia acomodada, entró en política durante sus estudios de Derecho, cuando lideró las huelgas universitarias de 1962 contra la dictadura de Antonio Salazar (1932-1968). En cuanto se convirtió en abogado, defendió a varios presos políticos.
En 1978, cuatro años después de la Revolución de los Claveles que puso fin a la dictadura, Sampaio se unió al Partido Socialista fundado por Mario Soares, su predecesor en la presidencia de Portugal (1986-1996).
Fue diputado durante muchos años y en 1989 se convirtió en secretario general del partido. Ese mismo año, es elegido alcalde de Lisboa con el apoyo de los comunistas.
Derrotado en las legislativas de 1991, gana, sin embargo, las presidenciales de 1996 en la primera vuelta, frente a Aníbal Cavaco Silva, que le sucederá en la presidencia (2006-2016).
Cuando terminó su segundo mandato como jefe de Estado, Sampaio, que tenía 66 años, se convirtió en enviado especial de la iniciativa "Alto a la tuberculosis" de la ONU. Después fue alto representante para la Alianza de las Civilizaciones, cuyo objetivo era impulsar iniciativas para superar los malentendidos y la incomprensión entre culturas y religiones.
En los últimos años, Sampaio dirigió una red internacional de apoyo a los estudiantes sirios.