Ciudad de México. En México, tres de cada 10 adultos mayores son víctimas de los fraudes que se realizan por teléfono en los que supuestamente se comunican de una institución bancaria, informó este miércoles la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).
Óscar Rosado Jiménez, presidente del organismo defensor, indicó que en el último año este tipo de fraudes a adultos mayores han sido los que más han crecido.
“El fraude a distancia, generalmente por teléfono, la ingeniería social, aquí sí hay un crecimiento, con este mecanismo entre enero y junio de 2019 había mil 800 quejas y en ese mismo periodo pero de este año hay 4 mil, es decir, un crecimiento de 135 por ciento”, dijo en videoconferencia.
Precisó que actualmente entre las autoridades del sistema financiero y las instituciones bancarias, hay una intensa campaña para disminuir este tema.
“Lo que se ha logrado es que el impacto en este tipo de defraudación entre octubre, noviembre y diciembre de 2020, de manera gradual y sostenida ha venido bajando, pero a pesar de ello tenemos un rezago con lo que ocurrió en el segundo semestre del año pasado”, mencionó Rosado Jiménez.
Se trata de una modalidad en que las personas reciben llamadas por supuestos trabajadores de un banco, y se les informa que tienen cargos no reconocidos o que sus tarjetas han sido clonadas. Los estafadores solicitan el número de la tarjeta y los códigos de seguridad para supuestamente confirmar la información y es en ese momento cuando se les roban sus datos para después vaciar sus cuentas.
En este sentido, el presidente de la Condusef insistió en que al recibir este tipo de llamadas los usuarios se comuniquen directamente al banco para ratificar la información o colgar de inmediato, ya que “seguramente se tratará de un fraude”.
Por su parte, Daniel Becker, presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM), dio a conocer que gracias a todas las medidas y campañas que han tomado los bancos, las reclamaciones de los usuarios por fraudes en Terminales Punto de Venta disminuyeron 41 por ciento y en cajeros automáticos 38 por ciento.
Además, recalcó, las reclamaciones que procedieron en favor de los usuarios de la banca pasaron de 62 a 64 por ciento.