Ciudad de México. A ocho días de que Carlos Garfias Merlos, arzobispo de Morelia y vicepresidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), fue intubado debido a complicaciones del COVID-19, hoy los obispos auxiliares de dicha demarcación, Carlos Suárez Cázares y Juan Espinoza Jiménez, así como el presbítero Leopoldo Díaz Díaz, canciller del arzobispado informaron que el prelado fue extubado.
El pasado 12 de agosto, la arquidiócesis de Morelia dio a conocer que Garfias Merlos había tenido que ser sometido a dicho procedimiento, ello ocurrió dos días después de que se había informado su contagio, y que se había especificado que tenía síntomas leves en un comienzo de la enfermedad.
El arzobispo cuenta con su esquema de vacunación completo, no obstante, sí presentó complicaciones que lo llevaron a la hospitalización e intubación.
Hoy los obispos auxiliares detallaron que, aunque se retiró la intubación, “sin embargo fue necesario hacerle una traqueostomía, es decir un orificio que se realiza quirúrgicamente en la parte del cuello, y es una vía respiratoria para las personas que aún no pueden respirar bien”.
Añadieron que “todavía permanece en sedación inducida, por lo que aún no está consciente. Todo esto presenta un gran avance positivo” y destacaron que lo anterior “alienta nuestra esperanza sobre el estado de salud de monseñor Carlos Garfias Merlos”.
Agradecieron el “cuidado de los médicos” y la “oración del pueblo de Dios” y agregaron que los familiares del arzobispo “que se encuentran en la casa episcopal también siguen mejorando”.
"Agradecemos que sigan constantes en la oración y se mantengan firmes en la esperanza a fin de que nuestros enfermos continúen su recuperación”.