El gobierno federal acordó con los comisionistas —los encargados de llevar hasta los hogares mexicanos el gas licuado de petróleo (LP)— comenzar un proceso de regularización.
A dos semanas de haber comenzado el tope de precios en el energético que es utilizado por el 8 de cada 10 familias en el territorio nacional, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) pactó con los trabajadores iniciar una serie de mesas de trabajo para llegar a una solución ante su inconformidad.
A través de un comunicado el Gremio Gasero Nacional, encabezado por José Adrián Rodríguez, señaló que el titular de la Profeco, Ricardo Sheffield Padilla, será el vínculo entre los comisionistas y las empresas de gas LP “para buscar la mejor solución a esta causa emergentes”.
Por separado, la dependencia federal informó que los comisionistas fueron atendidos, como lo dispuso el presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Se acordó que los propios trabajadores integrarán listas, a modo de padrón, distinguiendo en ellas a las personas que son comisionistas formales de los permisionarios, y a quienes desempeñan esa actividad sin tener esa condición”, dijo.
Detalló que se elaborarán listados según el giro de la actividad y fuente de abasto del gas LP, tanto de los llamados portatileros —los encargados de surtir cilindros—, como de los piperos, con el fin de que inicien un proceso de regularización.
Sheffield Padilla apuntó ante los comisionistas que la dependencia a su cargo no tiene facultades para abordar la problemática, exceptuando las que competen a la protección del consumidor—.
En la reunión se planteó que la próxima semana se realicen mesas de diálogo entre los trabajadores y los permisionarios, para avanzar en este proceso de regularización.
Los comisionistas reconocieron que fueron escuchados sus peticiones y deben cumplir con sus obligaciones en acuerdos que convengan a los distribuidores, comisionistas y consumidores.
En días pasados el Rodríguez, que también es presidente de la Unión de Gaseros del Valle de México, dijo que en el corto plazo no preveían un nuevo paro, pues buscan que sus márgenes de ganancia —que pasaron de 2.50 pesos a 50 centavos— se restablezcan.