Guadalajara, Jal. El consejo de rectores de la Universidad de Guadalajara (UdeG) calificó de agresión a la autonomía universitaria el anuncio de un recorte presupuestal de 140 millones de pesos, cantidad que se reasignaría al proyecto del Hospital Civil de Oriente, en Tonalá, a pesar de que el año pasado supuestamente se destinaron 3 mil millones de pesos de un préstamo de 6 mil 200 millones pedido por el gobierno estatal para atender la emergencia por Covid-19.

Quienes integramos el consejo de rectoras y rectores de la UdeG manifestamos nuestro profundo rechazo a la intención del gobernador (Enrique Alfaro), ante una supuesta petición de algunos diputados, de cercenar 140 millones de pesos del presupuesto 2021 ya asignado a la UdeG para destinarlo a la construcción del Hospital Civil de Oriente, publicaron en un desplegado en medios locales este lunes.

La postura de las autoridades universitarias incluyó la determinación de combatir por todos los medios legales, políticos y sociales un recorte que a su juicio es un atropello y una medida política que busca castigar a la casa de estudios por mantener una postura diferente a la del gobierno estatal respecto al regreso a clases presenciales.

Nuestra universidad no merece ser castigada como represalia por salvaguardar la vida y la salud de su comunidad universitaria, agrega el texto, firmado también por el rector general, Ricardo Villanueva.

También señala que la construcción del Hospital Civil de Oriente tendría que hacerse con recursos del crédito solicitado el año pasado.

En rueda de prensa, el gobernador Enrique Alfaro acusó el lunes que la postura universitaria es personalísima –evitó decir de quién– y reiteró que es preferible apoyar la construcción de hospitales que proyectos científicos como el Museo de las Ciencias, para el cual estaban destinados los 140 millones de pesos que el gobierno estatal aún no ha entregado a la UdeG y, de materializarse el recorte, no lo entregará.

Estoy haciendo una recopilación de audios de todas las veces que el rector (Villanueva) dijo que lo habíamos hecho muy bien. Nosotros no vamos a generar un ambiente de tensión con la UdeG. Si hay alguien que quiera estirar las cosas, llevarlas a otro nivel, mandarnos sus plumas, sus micrófonos y sus emisarios a atacarnos, le sugeriría que lo pensara dos veces, pero que cada quien haga lo que considere, dijo Alfaro.

Interrogado sobre quién genera la tensión, el gobernador negó que sean los rectores y dijo que él sabía cómo funcionan las cosas en la universidad, pero confia en que ésta se mantendrá por encima de las visiones personales de quien ni siquiera da la cara y señaló que ninguna institución pública debería ser rehén de agendas particulares.