La Habana. El gobierno cubano aprobó el viernes por la noche el decreto de ley que autoriza el funcionamiento de las Pymes privadas y estatales, una medida que avanza hacia las reformas económicas en el país socialista, en el que predomina la empresa pública.
"El Consejo de Estado aprobó el decreto-ley 'Sobre las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas', que facilita su inserción de forma coherente en el ordenamiento jurídico como actor que incide en la transformación productiva del país", dijo una nota en la página web de la Asamblea Nacional del Poder Popular de Cuba.
La aprobación de las "normas jurídicas" que regirán las Pymes "ya es un hecho", celebró en Twitter el presidente Miguel Díaz-Canel. "Seguimos dando pasos firmes en la actualización del modelo económico de Cuba", apuntó.
Su ministro de Economía, Alejandro Gil, destacó que, con la legalización de las Pymes y "una mayor autonomía de la empresa estatal", "la economía cubana entra en un proceso de transformación y desarrollo".
Esta decisión, largamente esperada por los emprendedores cubanos, llega casi un mes después de que estallaron las inéditas manifestaciones del 11 y 12 de julio.
En una sesión ordinaria del Consejo de Estado, en la que Díaz-Canel participó a través de videoconferencia, se aprobaron otras medidas orientadas al desarrollo de las cooperativas no agropecuarias y de los trabajadores independientes o por cuenta propia.
La asamblea determinó que las Pymes podrán ser estatales, privadas o mixtas y que las micro empresas podrán tener de uno a 10 empleados, las pequeñas, de 11 a 35 personas, y las medianas hasta 100 trabajadores.
En febrero pasado el gobierno amplió a más de 2 mil las actividades en las que pueden laborar los trabajadores independientes en la controlada economía cubana.
El gobierno señaló en junio que algunas actividades autorizadas para trabajadores independientes no estarán en la lista de las Pymes, como "programador de equipos de cómputo, tenedor de libros, traductores e intérpretes, veterinarios para animales afectivos o domésticos, diseñadores y ciertos tipos de consultorías".
El detalle se determinará en la reglamentación que deberá ser publicada próximamente.
El primer ministro, Manuel Marrero Cruz, había dicho en junio que la ampliación de actividades a manos de privados "no conduce a un proceso de privatización, pues hay límites que no se pueden rebasar".
Para la comunidad de negocios de Estados Unidos, el gobierno de Díaz-Canel tomó "una decisión significativa que puede revalorizar el interés" empresarial en la isla, dijo el Consejo Económico y Comercial Cuba-Estados Unidos en junio pasado cuando el gobierno cubano anunció que reglamentará las Pymes.
Cuba está acelerado sus reformas, mientras enfrenta una profunda crisis económica por la pandemia de coronavirus que ha golpeado al sector turístico, motor de su economía, y en medio del embargo económico de Estados Unidos endurecido bajo los gobiernos de Donald Trump y Joe Biden.