Ciudad de México. Al conmemorase hoy siete años del derrame de residuos peligrosos ocurrido en los ríos Sonora y Bacanuchi, por parte de la mina Buenavista del Cobre, de Grupo México, el representante adjunto de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) en el país, Jesús Peña Palacios, reiteró la importancia de fortalecer los procesos de reparación integral para las víctimas y el emprendimiento de acciones concretas para la recuperación del medio ambiente.
En declaración a medios expuso que ante la llegada de una nueva administración en Sonora es oportuno recordar que la responsabilidad del Estado, a nivel estatal y federal, “incluye asegurar medidas transparentes, participativas y accesibles para todas las comunidades afectadas, en línea con los estándares internacionales en la materia”.
También, señaló que tal como lo establecen los principios rectores sobre las empresas y los derechos humanos de las Naciones Unidas, la responsabilidad de las compañías de respetar las garantías de las personas no depende de la capacidad o la voluntad del Estado, e indicó que éstas también están obligadas a observar una debida diligencia en sus procesos y remediar sus errores.
En este sentido, insistió que no se puede “dejar de repetir que es fundamental lograr una reparación adecuada y asegurar la no repetición para garantizar efectivamente los derechos a las víctimas”.