Washington. El secretario de Justicia de Estados Unidos, Merrick Garland, prohibió ayer a los fiscales federales obtener las comunicaciones de periodistas en investigaciones sobre datos filtrados, con excepciones limitadas, al revertir políticas que llevaban años en el departamento.
La nueva política codifica en gran medida el compromiso que Garland hizo en junio, cuando prometió que el Departamento de Justicia abandonaría la práctica de confiscar la información de los periodistas en investigaciones sobre filtraciones. La medida tiene como objetivo resolver un asunto políticamente complicado que durante mucho tiempo ha irritado a los fiscales que tratan de sopesar los derechos que la Primera Enmienda otorga a los medios de comunicación con el deseo del gobierno de proteger la información clasificada.
Pero el memorando deja claro que los fiscales federales pueden, en algunos casos, obtener los datos de las comunicaciones de los periodistas, por ejemplo si el reportero es sospechoso de trabajar para agentes de otro país o para organizaciones terroristas. También hay una excepción para situaciones con riesgos inminentes, como secuestros o delitos contra niños.
Garland se vio impulsado para actuar luego de las críticas que surgieron cuando se dio a conocer que durante el gobierno del ex presidente Donald Trump, el departamento obtuvo los datos de periodistas del Washington Post, CNN y el New York Times como parte de unas pesquisas sobre quién había divulgado los secretos del gobierno relacionados con la trama de Rusia y otras cuestiones de seguridad nacional.
También se obtuvo la información de miembros del Congreso federal y de su personal, así como del ex asesor legal de la Casa Blanca, Don McGahn.
Práctica “errónea”
El anuncio de Garland ocurre luego de que el presidente Joe Biden aseguró que no permitiría que el Departamento de Justicia obtuviera los registros de llamadas y correos electrónicos de periodistas, señalando que la práctica era “errónea”. Desde entonces, Garland y otros empleados de alto rango del Departamento de Justicia se han reunido con representantes de medios de comunicación, y ambas partes estuvieron de acuerdo en que eran necesarias nuevas políticas. Garland también ha dicho que respaldaría una legislación federal para añadir más protecciones para los periodistas.
La acción fue elogiada inmediatamente por defensores de medios de información.