Acapulco, Gro. En conmemoración por el 149 aniversario luctuoso de Benito Juárez, el presidente Andrés Manuel López Obrador depositó un arreglo floral y montó guardia de honor junto al monumento del Benemérito de las Américas en la avenida Costera Miguel Alemán en Acapulco, Guerrero.
Lo acompañó la Secretaria de Gobernación Olga Sánchez Cordero, quien sostuvo que la cuarta transformación ha retomado la vocación del juarismo.
También estuvo presente el Gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo, así como la alcaldesa de Acapulco, Adela Román Ocampo, la alcaldesa de Guelatao, Oaxaca, Consuelo Santiago García, y el director general del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, Adelfo Regino Montes.
Desde este puerto, que oficialmente se llama Acapulco de Juárez debido a que fue uno de los sitios donde vivió el ex presidente, Sánchez Cordero llamó a “honrar la memoria y el legado de uno de los próceres de la democracia mexicana, el inmortal Benito Juárez García”.
Desde ese momento, subrayó, las instituciones se consolidaron. “En el presente, la cuarta transformación de la vida pública de México ha retomado la vocación que el juarismo proyectó: consolidar un Estado que esté al servicio del pueblo, como lo ha dicho en muchas ocasiones el presidente Andrés Manuel López Obrador”.
Tras recordar que en los momentos más convulsos para México defendió a la República de un embate de un imperio extranjero, indicó que “la obra de Juárez es descomunal, arrancó el dominio de un poderoso estamento clerical y devolvió ese poder al pueblo. Las leyes de reforma, en su conjunto, transformaron el sistema ideológico, material, económico, semi feudal, en una una ética laica y republicana, esta es la segunda gran transformación de nuestra historia”.
La influencia del juarismo, dijo, está en cuatro pilares sobre los que hoy se fundamenta el desarrollo de México: leyes, instituciones, pluralismo y democracia. Apuntó que el tiempo de Juárez coincide con el nacimiento del México moderno, porque fue a partir de las leyes de reformar que cristalizaron los fines de la independencia del país.
Otro de los legados del ex mandatario es un andamiaje institucional que fortalece al país frente a poderes exteriores y puso a disposición de la gente el poder del estado, indicó la Secretaria de Gobernación.
Recalcó que “tenemos la responsabilidad de reivindicar, como lo hacemos ahora desde esta cuarta transformación, la importante herencia que el legado juarista ha depositado en la conciencia mexicana, que la conducción de nuestras acciones y pensamientos se guíen con esa mirada humanista, solidaria, y justa de los principios e ideales del Benemérito de las Américas”.
Mientras que el gobernador guerrerense recordó que Juárez llegó a Acapulco en julio de 1855 luego de un exilio, para después participar en la consolidación del plan de Ayutla desde este puerto, e hizo un recuento de las condiciones adversas que tuvo que superar en su mandato.