Mexicali, BC. La Coalición Pro Defensa del Migrante exigió la atención inmediata a las personas en contexto de migración que se encuentran en el campamento de la Garita Internacional de El Chaparral, en espera de asilo político del gobierno de Estados Unidos.
Advirtieron que esperan una reacción fuerte y enérgica de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) para garantizar la seguridad de los migrantes, acorde a los compromisos de México en los tratados internacionales, leyes federales, estatales y reglamentos municipales.
También se pronunciaron por instrumentar un plan de acción integral que proteja sus derechos, con acciones puntuales que garanticen su seguridad e inclusión pacífica, con respeto y voluntariedad.
Los defensores de migrantes de esta frontera hicieron un llamado urgente a los gobiernos para que actúen de inmediato ante la situación, que calificaron de "preocupante" que prevalece en este campamento de Tijuana.
Rechazaron cualquier manifestación violenta, de rechazo, racismo y xenofobia hacia personas migrantes, por lo que apelaron a la comprensión y reflexión sobre la movilidad humana y sus causas, y confiaron en que prevalezca un ambiente de respeto y solidaridad, que caracteriza a la población de Baja California.
La coalición acusó al gobierno de Baja California y de Tijuana de ausencia y falta de voluntad en la atención para quienes se encuentran en el campamento —que alberga a 3 mil personas en condiciones de alta vulnerabilidad— en rubros como seguridad, sanidad, así como de falta de acceso a sus derechos.
"Es evidente la falta de acciones para brindar una solución inmediata y más preocupante aún porque están por concluir los gobiernos estatal y municipal.
"Baja California es un Estado donde convergen diferentes tipos de población en contexto de movilidad por el tránsito, retorno y destino de personas migrantes, ejemplo de ello son las personas por devolución exprés de Estados Unidos bajo el título 42, que iniciaron en marzo de 2020, migrantes internos mexicanos y extranjeros desplazados por la violencia, solicitantes de protección internacional o por cuestiones climáticas en sus países de origen que pretenden solicitar asilo humanitario", señalaron las siete organizaciones, de defensa de los migrantes en Tijuana y Mexicali.
Esta situación, explicaron, incrementó de forma considerable la población en la entidad, que requiere urgentemente de espacios disponibles en albergues y atención integral humanitaria emergente, por lo que son atendidas en albergues para migrantes y ahora en el campamento El Chaparral, considerado una "especie de tierra de nadie".