Budapest. Hungría reafirmó este viernes su oposición al acuerdo sobre la fiscalidad de las multinacionales adoptado por 130 países que prevé en particular una tasa de imposición mínima del 15 por ciento, ya que lo considera un "estorbo para la actividad económica".
Budapest aplica una tasa de 9 por ciento para las multinacionales instaladas en el país y por ello "rechaza cualquier iniciativa que conduzca a alzas de impuestos y que debilite la competitividad", reza un comunicado transmitido a la Afp, citando declaraciones del ministro de Finanzas, Mihaly Varga.
Después de años de negociaciones, 130 países acordaron el jueves una reforma histórica, que implica fijar un impuesto de sociedades mínimo, bajo los auspicios de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Un pequeño grupo de países, entre ellos Irlanda -que emitió sus propias "reservas"- y Hungría, decidieron no firmar la declaración.
El proyecto de tasa impositiva de 15 por ciento "es demasiado elevado", consideró el ministro de Finanzas.
El gobierno húngaro, acostumbrado a llevar la contraria en el seno de la Unión Europea (UE), prometió sin embargo que seguirá "trabajando de forma constructiva con los demás Estados miembros" para llegar a un acuerdo "justo".
Los participantes en las negociaciones se dieron hasta el mes de octubre para "finalizar los trabajos técnicos" y preparar "un plan de aplicación efectiva en 2023".