Ciudad de México. Al mantenerse el incremento de hospitalizaciones por Covid-19, la ciudad de México continuará en el semáforo amarillo, pero sin ninguna nueva restricción, pues el objetivo es acelerar el proceso de vacunación y seguir abriendo las actividades económicas.

La jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, señaló que, incluso, se está analizando la reapertura de bares -dado que es un sector que ha tenido mucha afectación-, en un esquema, donde las personas que ingresen deban presentar una prueba de que sean negativos al Covid-19. “Ya se estaría informando en la próxima semana y sería bajo esta condición”, apuntó.

“Por lo pronto seguimos como hemos seguido las semanas anteriores, ya prácticamente todas las actividades están abiertas, algunas con un porcentaje menor que otras; y, el objetivo, pues es –como hemos dicho– ampliar la vacunación, fortalecer el proceso de vacunación para que, lo más pronto posible, pues puedan abrirse todas las actividades”.

La mandataria aseguró que todos los hospitales, a excepción del Citibanamex que ya se cerró, están en condiciones de aumentar su capacidad. “La Secretaría de la Defensa Nacional tiene mil camas, que en este momento están viendo -si fuera necesario, esperemos que no, poderlas tener disponibles”, expuso.

Dijo que se están elaborando una serie de modelos para ver cuál será el máximo de hospitalizaciones que podría haber en la ciudad tomando en cuenta el proceso de vacunación, para estar preparados en caso de algún crecimiento.

El director de Gobierno Digital de la Agencia Digital de Innovación Pública (ADIP), Eduardo Clark, detalló que hay 866 personas hospitalizadas por Covid-19 en la ciudad de México, con un incremento de 156 en comparación a la semana anterior.

Apuntó que el promedio diario de casos positivos en residentes de la capital del país ha incrementado de 240 a 931 entre el 24 de mayo y el 30 de junio, pero aún se trata de niveles bajos, con una tendencia creciente a tasas estables.

Dijo que el incremento de casos se concentra en los grupos de 20 a 39 años, mientras que los grupos de alta mortalidad y hospitalizaciones por Covid-19, es decir, de 50 años y más se mantienen estables y en niveles mínimos de casos.

“En los grupos de edad que han experimentado incrementos en casos, no se aprecia una tendencia creciente de hospitalizaciones, además de representar los grupos de mucho menor riesgo de hospitalización”, apuntó.

Los ingresos hospitalarios -añadió- se han incrementado de un mínimo promedio diario de 48 a 89 en las últimas cuatro semanas. Sin embargo, están en niveles relativamente bajos, consideró.