°C -
|

La Jornada

Últimas noticias
Anuncio
Anuncio

Suplentes salvan a Italia e imponen récord de partidos sin derrota

Imagen
El italiano Federico Chiesa anotó el primer gol para encaminar la victoria 2-1 sobre los austriacos ayer en el estadio de Wembley. Foto Ap
27 de junio de 2021 10:29

Londres. Con tres refinados toques de control, técnica y llegada, Federico Chiesa puso fin a 95 minutos de frustración para los italianos. El equipo batió récords y avanzó a los cuartos de final de la Eurocopa gracias a una defensa que finalmente concedió un gol después de más de 19 horas sin recibir, pero que ligó su décimo segunda victoria consecutiva.

Después de superar sin problemas la fase de grupos en la Euro 2020, Italia batalló para ganar 2-1 ante Austria en unos octavos de final que se extendieron a tiempo extra. Fueron Chiesa y Matteo Pessina, los suplentes del técnico Roberto Mancini, los que hicieron la diferencia en el estadio de Wembley.

Chiesa, quien estaba completamente libre, bajó el esférico con la cabeza tras el pase de Leonardo Spinazzola, controló el balón con la pierna derecha y lanzó con la zurda un tiro a ras.

Los italianos avanzaron gracias a la destreza individual. La segunda anotación se debió más a la calma en medio de una pelea cerca de la portería. Matteo Pessina, quien ingresó a la mitad del segundo tiempo, envió el balón al fondo de la portería a los 115 minutos.

Italia también celebraba en tiempo extra tras establecer un récord mundial de la mayor cantidad de minutos sin conceder un gol en competencias internacionales. La marca anterior la estableció la propia Azurra con el guardameta Dino Zoff. Entre 1972 y 1974, el combinado italiano pasó mil 143 minutos sin permitir una anotación.

Pero los azurri concedieron una diana por primera vez después de mil 168 minutos, con un cabezazo de Sasa Kalajdzic a los 114 de los tiempos extras tras un tiro de esquina.

Italia se sostuvo para llegar a 31 juegos seguidos sin perder, imponiendo otro récord.

En el otro partido del día, Dinamarca goleó 4-0 a Gales y dio un paso más en el torneo, empañado por el problema cardiaco que casi le cuesta la vida a Christian Eriksen.

Un doblete de Kasper Dolberg y los goles de Joakim Maehle y Martin Braithwaite metieron en cuartos a los daneses, que sueñan con repetir el título continental logrado en 1992.

En cuartos de final, Dinamarca se medirá el próximo fin de semana al vencedor del choque entre Holanda y República Checa.

Gareth Bale, mediocampista y capitán de la selección galesa, lamentó la derrota.

Los chicos están frustrados y enfadados, pero prefiero dejar la competencia luchando, que bajando los brazos, afirmó el jugador del Real Madrid, cedido la pasada temporada al Tottenham.

Gales, que había sido un sorprendente semifinalista en la pasada edición de la Eurocopa en Francia 2016, donde fue derrotado por Portugal, deja de este modo la competición.

Hemos perdido una buena ocasión, pero si hay algo que no se puede reprochar a los chicos es haber peleado y haberse entregado. Estoy muy orgulloso de ellos, concluyó.

Sigue polémica por falta de apoyo a comunidad LGBT

Mientras tanto, varios patrocinadores de la UEFA retomaron la polémica de la protesta en favor de la comunidad LGBT en la Eurocopa, mostrando en los paneles luminosos al borde del terreno los colores arcoíris, un golpe al organismo europeo, que había prohibido el miércoles una iluminación similar.

La UEFA avivó la polémica la semana pasada prohibiendo a las autoridades de Múnich iluminar el miércoles el Allianz-Arena de la ciudad germana con los colores simbólicos de la comunidad LGBT y de la tolerancia, para protestar contra una ley húngara homófoba con ocasión del partido Alemania-Hungría (2-2).

La decisión de la instancia organizadora de la Eurocopa, que invocó una obligación de neutralidad política, le valió críticas en toda Europa. Defendiendo su decisión, la UEFA colocó en Twitter su propio logo con un arcoíris reafirmando su compromiso firme contra la homofobia.

Anuncio