El presidente Andrés Manuel López Obrador dio a conocer que ordenó a la Consejería Jurídica de la Presidencia, solicite a la Fiscalía General de la República (FGR), atraiga la investigación de la matanza de 14 personas, ocurrida el fin de semana en Reynosa.

“Los hechos lamentables en Reynosa le costaron la vida a inocentes, todo indica que no fue un enfrentamiento, que fue un comando que disparó a gente inocente. Es un ataque cobarde que arrebata la vida a inocentes. Se buscará y se castigará a los responsables”.

En el Salón Tesorería de Palacio Nacional, también se refirió al caso del avión presidencial, cuyo costo se estableció entren 120 y 130 millones de dólares. Relató que también fue tema en su conversación de hace dos semanas con Kamala Harris.

“Nos ha costado mucho. Le dije a la vicepresidenta Kamala Harris, que es tan lujoso que no hay quien lo comprara, y me dijo que a lo mejor, éstos potentados que ofrecen viajes al espacio, a lo mejor, a ellos les interesaría tener un avión tan lujoso”.

López Obrador preguntó por el costo de un viaje sideral, y una asistente a sus conferencias le respondió, que son 60 mil dólares, a lo que el presiente replicó, “no, yo creo que más”.

Jesús Ramírez, su vocero presidencial le informó que el costo por una aventura de esas es de medio millones de dólares. Y así el presidente repuso que seguirá ofreciendo el avión, “es de muy buena calidad pero no está hecho para nuestro país, solo para presidentes que viajen mucho al extranjero”, porque su autonomía mínima es de 5 horas.

También, dio a conocer que su administración está a punto de terminar de organizar tianguis del bienestar, con artículos que se han decomisado como ropa, calzado, ventiladores, juguetes, gran cantidad de telas, y que están almacenados en 200 y 300 bodegas en el país. El propósito es repartirlos entre los pobres de distintas regiones en el país.

“Vamos a elaborar una reforma administrativa, para que todo lo que se tenga se entregue a la gente”.

Y lo mismo dio a conocer que en diciembre ocurrirá una rifa organizada por la Lotería Nacional, de un terreno de dos mil kilómetros cuadrados sobre la playa al sur de Sinaloa, en la cercanía con Nayarit.

Esa enorme aérea perteneció al ex gobernador de Sinaloa, Antonio Toledo Corro, y en el sexenio de Felipe Calderón, Fonatur la adquirió por un monto por un monto de 120 millones de dólares -el monto de lo que cuesta el avión presidencial-, y ahora se fraccionará para rifarlo y recuperar esos recursos.

El dinero, dijo, se ocupará para concluir el levantamiento de la presa Santa María, que resolvería el abasto de agua a las poblaciones cercanas y a la producción de alimentos.