Ciudad de México. En el proceso electoral “no fue poca cosa ganarles a todos; se nos vinieron con todo (Carlos) Salinas, (Vicente) Fox, (Felipe) Calderón, (Ernesto Zedillo), Diego (Fernández de Cevallos), los medios de comunicación, el PRI el PAN”, adujo el presidente Andrés Manuel López Obrador.
En Palacio Nacional, al momento de anunciar que mañana se aplicará la segunda dosis de vacuna antiCovid-19, durante la rueda de prensa que celebró en el salón Tesorería del inmueble histórico, el mandatario también aclaró que su visión de las clases medias no es blanco y negro:
“Cuál es el ideal: hay que sacar a millones de mexicanos de la pobreza con una clase media fraterna, humanista, no individualizada como lo hizo la política neoliberal. Y cómo lo hicieron, con la educación, ¡retiraron el civismo, la historia. Apostaron a desacreditar a nuestros personajes históricos. Se le lanzaron a Hidalgo, a Morelos, a todos para borrar el pasado.”
El tabasqueño argumentó que el “pensamiento conservador” pretende el fin de la historia: “existe eso, pero hay que seguir creando conciencia para tener una sociedad mejor.”
En el contexto postelectoral, dijo, el sector que “se portó muy bien fue la jerarquía de la iglesia, solo uno obispo (Juan Sandoval Iñiguez) o dos -se habían pronunciado en su contra-, pero fueron respetuosos; y las iglesas evangélicas fueron respetuosas, no así las cúpulas del poder económico, sus voceros y sus intelectuales, y la prensa extranjera.”
Al referirse a su visión de las clases medias, consideró que “si hay un sector de la clase media, muy individualista, que le da la espalda al prójimo, aspiracionista, que lo que quieres es ser como los de arriba y encaramarse, sin escrúpulos morales de ninguna especie, es increíble que apoyan a gobiernos corruptos, ¡increíble!”.
Y ubicó parte de ese sector en la Ciudad de México, y expuso que en el tiene influencia un periódico editado en la capital. Describió un tuit de un ex director de ese diario, donde dividió el territorio de ésta en los que pagan impuestos y los que reciben subsidios, son “los de mentalidad porfirista, los educados, los de mayor nivel académico…”