Washington. La Casa Blanca advirtió a los ejecutivos corporativos y líderes empresariales el jueves que intensifiquen las medidas de seguridad para protegerse contra los ciberataques después de que las intrusiones interrumpieran las operaciones en una empresa empacadora de carne y una importante red de oleoductos.
Ha habido un aumento significativo en la frecuencia y el tamaño de los ataques de ransomware (en los que se pide un pago por habilitar los sistemas), dijo en una carta Anne Neuberger, asesora de ciberseguridad del Consejo de Seguridad Nacional.
“Las amenazas son graves y van en aumento. Les instamos a tomar medidas críticas para proteger a sus organizaciones y al público estadunidense”, señaló.
Los recientes ciberataques han obligado a las empresas a ver el ransomware como una amenaza a las operaciones comerciales centrales, ya que han pasado de robar a interrumpir las operaciones, afirmó.
Fortalecer la resistencia del país a los ciberataques es una de las prioridades del presidente Joe Biden, agregó.
“El sector privado también tiene la responsabilidad crítica de protegerse contra estas amenazas. Todas las organizaciones deben reconocer que ninguna empresa está a salvo de ser atacada por ransomware, independientemente del tamaño o la ubicación”, escribió Neuberger.
La carta se conoce después de que una importante empacadora de carne viera afectadas sus operaciones en América del Norte y Australia tras un ataque de ransomware.
Un grupo de ciberpiratería vinculado a Rusia que se conoce con el nombre de REvil y Sodinokibi estuvo detrás del ciberataque contra JBS, dijo a Reuters una fuente con conocimiento del tema.
El ciberataque siguió al que realizó el mes pasado un grupo con vínculos con Rusia contra Colonial Pipeline, la red de ductos de combustible más grande de Estados Unidos, que paralizó el suministro de gasolina durante varios días en el sureste de Estados Unidos.